La Junta de Gobierno vigilará estrechamente las presiones inflacionarias, así como todos los factores que inciden en la trayectoria prevista para la inflación y en sus expectativas
CIUDAD DE MÉXICO.- El Banco de México (Banxico) informó este Jueves que hará un incremento de menor magnitud de la tasa de interés en su próxima reunión de política monetaria para intentar frenar la inflación, cuya meta de 3 por ciento se alcanzará hasta el cuarto trimestre de 2024 o 2025.
“La mayoría de los miembros de la Junta de Gobierno considera que ante la postura monetaria que ya se ha alcanzado y en función de la evolución de los datos, el incremento en la tasa de (interés) en la próxima reunión podrá ser de menor magnitud”, según las minutas de la Junta de Gobierno del Banco de México, con motivo de la decisión de política monetaria anunciada el 9 de Febrero de 2023.
En esa feccha, Banxico informó que subía por decimotercera vez consecutiva las tasas de interés para controlar la inflación, que acumula dos meses consecutivos de incrementos de precios.
“La Junta de Gobierno del Banco de México decidió incrementar en 50 puntos base el objetivo para la tasa de Interés Interbancaria a un día a un nivel de 11.00 por ciento, con efectos a partir del 10 de febrero de 2023”, informó entonces el organismo dirigido por Victoria Rodríguez Ceja.
La Junta de Gobierno vigilará estrechamente las presiones inflacionarias, así como todos los factores que inciden en la trayectoria prevista para la inflación y en sus expectativas, de acuerdo con las minutas de Banxico.
“Ello, con el objetivo de determinar una tasa de referencia congruente en todo momento, tanto con la convergencia ordenada y sostenida de la inflación general a la meta de 3 por ciento en el plazo en el que opera la política monetaria, como con un ajuste adecuado de la economía y de los mercados financieros”, expresó el Banco de México.
Un miembro del banco central señaló que la evolución reciente descrita de la inflación subyacente y sus perspectivas son motivo para que el Banco de México actúe con aún más cautela.
Subrayó que se han hecho más evidentes los riesgos al alza relacionados con la persistencia del componente subyacente en niveles elevados y los de presiones de costos.
Externó su preocupación con respecto a que el balance de riesgos para la inflación continúa sesgado al alza.
Otro miembro del Banco de México recalcó que la política monetaria debe implementarse de manera firme y contundente, a fin de evitar la prolongación del proceso inflacionario y sus dolorosos efectos en la economía, especialmente para los hogares de menores ingresos.
Advirtió sobre el riesgo de que la inflación no disminuya a un ritmo consistente con la convergencia a la meta en el horizonte de planeación.
Enfatizó como presiones de inflación internas la dinámica del consumo, el apretamiento del mercado laboral y las expectativas de inflación altas.
Un miembro más del Banxico argumentó que, ante el sumamente complejo panorama inflacionario, se requiere recalibrar la astringencia monetaria y observó que la convergencia inflacionaria requiere de una tendencia decreciente y sostenida del componente subyacente, en especial el de las mercancías alimenticias.
Apuntó que los precios de estas son la principal referencia del público para la formación de expectativas.