AMLO lanzó varios ataques directos al panista Ricardo Anaya y al candidato del PRI, José Antonio Meade en mítines en el Estado de México.

CIUDAD DE MÉXICO.-  Tras el primer debate presidencial, el candidato Andrés Manuel López Obrador, aseguró que salió ileso, airoso y que libró el encuentro, e incluso destacó que subió de 48 a más de 50 puntos en la intención del voto al no caer en ataques de sus contrincantes, por lo que seguirá con esa estrategia en los dos encuentros posteriores a realizarse en Tijuana y Mérida. 

A pesar de que durante el debate evitó las confrontaciones, el día de ayer, en mítines en el Estados de México, AMLO lanzó varios ataques directos al panista Ricardo Anaya y al candidato del PRI, José Antonio Meade, a quienes pidió que pierdan con dignidad las elecciones del 1 de julio, puesto que —bromeó— “ya se les mojó la pólvora”. 

Por otro lado, Anaya señaló que en está ocasión no noqueó a López Obrador, porque eso lo reservará para el día de la elección de 1 de julio, el día "importante". 

Dijo que el tabasqueño quedó exhibido como un hombre sin explicaciones a sus propuestas “absurdas”, que está lleno de contradicciones y de ideas antiguas. “Muy pronto va a entender [López Obrador] que nosotros le vamos a ganar de manera contundente la elección”, afirmó.