La alcaldesa Montserrat Caballero anunció que se habrá de colocar un cerco perimetral en unos 10 días aproximadamente, “no esperemos una situación catastrófica”, dijo

TIJUANA.- “Debido a que las acciones del Estado o de la Federación no llegan, nosotros tomamos nuestras propias acciones, no me puedo esperar, yo hago mi parte porque aquí todos se echan la bolita y no veo resultados por ningún lado”, afirmó la Alcaldesa Montserrat Caballero Ramírez, durante su visita al Campamento del Chaparral.

Aseguró que su presencia en el lugar fue para conocer de primera mano la condición de los asentados como lo hizo con una de las migrantes en contexto de movilidad procedente de Guatemala que en el momento era atendida en el módulo instalado por la Dirección Municipal de Atención al Migrante (DMAM), a cargo de Enrique Lucero.

Estamos con ellos, no en contra de ellos y por la falta de acciones ocurrió esto, aclaró la Alcaldesa en el lugar, quien espera también una coordinación con el DIF Estatal, luego de que Rosario Lozada Romero, titular del Sistema Municipal de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (SMPINNA), no se da abasto; no voy a seguir esperando a que venga la ayuda del cielo, acotó.

“Vengo a avisarles de manera pacífica que vamos a colocar un cerco perimetral en unos 10 días aproximadamente, vamos a credencializarlos, no esperemos una situación catastrófica, vamos a apoyarlos para los que quieran regresarse a su lugar de origen, se les pagarán los gastos de traslado de regreso o bien, que conozcan las opciones de los albergues”.

Durante su recorrido por el área, Caballero Ramírez observó que se dejó crecer este campamento y no se hizo nada ni se ha hecho nada, y sin mencionar nombres, lo que ella quiere es poner cartas en el asunto, porque se acerca la temporada de lluvias, afirmó.   

La alcaldesa acudió acompañada de la coordinadora de SMPINNA; de Gerardo López Montes, Secretario de Bienestar; Enrique Lucero, titular de la DMAM y personal de migración para brindar sobretodo información, la cual desconoce la mayoría.

De acuerdo a un censo, se corroboró que el 70 por ciento de las personas instaladas son mexicanos;  ya no es tanto un tema migratorio, es gente que ya ve esto como una colonización, como una favela  donde fueron detectadas tres menores de edad embarazadas de 13, 17 y 15 años de edad, lo que demuestra que ya existe la trata de personas.