El paquete económico de 2022, que presentará el Ejecutivo al Congreso, tendría un avance muy limitado del gasto público
CIUDAD DE MÉXICO.- El paquete económico de 2022, que propondrá el Ejecutivo al Congreso el próximo miércoles, consideraría un avance muy limitado del gasto público, estimado en 0.8 por ciento, en términos reales, ante el menor crecimiento económico, y su impacto en la recaudación fiscal, además del agotamiento en los recursos de los fondos y fideicomisos, consideraron analistas.
Prevén menores ingresos petroleros, por una moderación en los precios internacionales del hidrocarburo y las dificultades internas para elevar la plataforma de producción.
Alejandro Saldaña, economista en jefe de Grupo Financiero BX+, proyectó que el gasto estará muy contenido por la tónica de austeridad del gobierno, con el propósito de estabilizar las finanzas públicas y de disminución de la deuda.
El gasto estará apretado y muy concentrado en los programas sociales y proyectos emblemáticos, el Tren Maya, la refinería de Dos Bocas y el aeropuerto Felipe Ángeles, pero con poco margen de acción para otras grandes obras de infraestructura y para revertir la declinación en la inversión pública”, enfatizó.
“Creo que mantendrá la línea de esta administración, de una priorización de la estabilidad fiscal, la prudencia y ciertos controles, buscando las metas del superávit primario y la reducción de la deuda como porcentaje del PIB”, recalcó.
James Salazar, subdirector de análisis de CI Banco, coincidió en que los ingresos serán limitados en 2022, y proyectó un avance real de 0.8 por ciento, debido a que calcula una menor captación fiscal por un menor crecimiento del PIB, el cual estimó en 3 por ciento; además, ya prácticamente se agotaron los recursos en los distintos fondos o fideicomisos.
Carlos González, director de análisis de Monex, advirtió que “el panorama del PEF 2022 puede ser mucho más retador el próximo año, puesto que estará bastante limitado; la prioridad será mantener finanzas públicas sanas, además de que se esperan mayores transferencias de apoyos financieros a Pemex”. Prevé que el PIB subirá 2.4 por ciento, lo que impactaría en la recaudación.