Suelen denominarse habilidades no cognitivas o del siglo XXI, tan importantes para desempeñarse exitosamente en los ámbitos académico, personal y profesional
ENSENADA.- Desde hace más de un año, la pandemia provocada por la Covid-19 derivó principalmente en una acentuada crisis sanitaria y económica en la órbita mundial, ante ello las instituciones educativas cambiaron su forma de operar de un día a otro, dando lugar al cierre masivo de actividades presenciales en más de 190 países y en todos los niveles educativos.
De acuerdo con la Dra. Karla Díaz López, coordinadora Académica de la Maestría en Educación en CETYS Universidad Campus Internacional Ensenada, particularmente, la pandemia hizo visible las desigualdades sociales y económicas que sabemos que inciden y se reflejan en la falta de equidad que caracteriza los sistemas educativos, al menos en el ámbito latinoamericano.
“Más allá de ello, tomando en cuenta que las escuelas son espacios de socialización, protección y desarrollo socioemocional, de manera consistente en diversos contextos se han realizado investigaciones de corte empírico mostrando evidencias respecto a que las denominadas habilidades socioemocionales (HSE), inciden en la prevención de situaciones de riesgo, tales como: violencia, depresión, drogadicción, deserción escolar y estrés”, puntualizó la experta CETYS.
Asimismo, la también investigadora destacó que, además, a través de habilidades socioemocionales es posible promover las competencias necesarias en el mercado laboral. “Éstas también suelen denominarse habilidades no cognitivas, habilidades del siglo XXI, de hecho, son consideradas como igual o más importantes que las habilidades cognitivas para desempeñarse exitosamente en los ámbitos académico, personal y profesional”, detalló.
En México, a manera de innovación educativa, hace apenas un lustro, se integraron las HSE al currículo de la educación obligatoria, mismas que se conciben como herramientas que permiten a las personas entender y regular sus emociones, sentir y mostrar empatía por otros, establecer y desarrollar relaciones positivas, tomar decisiones responsables, así como definir y alcanzar metas personales.
En este contexto, enfatiza la Dra. Karla, las HSE se definen como comportamientos, actitudes y rasgos de la personalidad que contribuyen al desarrollo de una persona, y que incluyen: conocerse y comprenderse a sí mismos, cultivar y mantener la atención, desarrollar sentido de eficacia y confianza en las capacidades personales, entender y regular las emociones, establecer y alcanzar metas positivas, sentir y mostrar empatía hacia los demás, establecer y mantener relaciones interpersonales armónicas, tomar decisiones responsables y desarrollar sentido de comunidad.
“Tomando en cuenta el escenario coyuntural del contexto educativo actual, cobra relevancia centrar la mirada en el análisis de las HSE y en particular, identificar su comportamiento en entornos de la educación a distancia que desde hace más de un año opera. Ante ello, cabe formular y otorgar respuesta a cuestiones puntuales tales como: de qué manera inciden y se promueven las habilidades socioemocionales en la escuela de hoy, qué habilidades socioemocionales cuentan con un desarrollo disminuido, e incluso el peso o influencia de éstas en los aprendizajes logrados por los estudiantes”, concluyó la Dra. Karla Díaz.