La afectación presupuestal no provocará incrementos en las tarifas eléctricas porque se diferirá a 12 meses
CIUDAD DE MÉXICO.- El desabasto de gas estadounidense, que dejó sin luz a 4.6 millones de usuarios en México, costará 20,000 millones de pesos (mdp) a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
“La afectación que se espera en términos presupuestales es de 20,000 mdp en estos cuatro días”, declaró el director de la empresa filial CFEnergía, Miguel Reyes Hernández, en conferencia de prensa virtual.
El funcionario recordó que el precio de 3 dólares por millón de BTU (British Thermal Units, la unidad térmica para el gas) se disparó a 200 dólares ante el congelamiento de gasoductos en Estados Unidos, principalmente en la cuenca de Permian, ubicada en Texas, estado que suspendió el abasto de gas hacia México.
Según CFE, el golpe presupuestal no provocará incrementos en las tarifas eléctricas porque se repartirá en los siguientes 12 meses.
“No tendrá afectaciones en tarifas. La tarifa eléctrica no se verá afectada por la estrategia de prorrateo ante estos altos costos de gas”, señaló Reyes Hernández.
Para contrarrestar los apagones, la compañía que dirige Manuel Bartlett prevé utilizar plantas eléctricas de carbón, combustóleo y diésel para reemplazar la salida de centrales que utilizan gas, y recordó que las autoridades estadounidenses están considerando utilizar plantas con combustibles fósiles para sustituir las fuentes renovables que no pueden operar por la contingencia climática.
Reyes Hernández dijo que se usarán las centrales de Tula, Salamanca, Manzanillo, Petacalco; Baja California I, II,III, IV y V; Topolobampo, Puerto Libertad, Puerto Guerrero, Villa de Reyes, Altamira, Mérida, Valladolid y Vapor.
La compañía añadió que va a recibir dos barcos de gas natural licuado en las terminales regasificadoras de Altamira y Manzanillo para aliviar la demanda de gas en México.
CFE dijo que plantas eléctricas de las empresas privadas Enel, Iberdrola y Fisterra también han sufrido el desabasto de gas natural.
México compra a empresas en Estados Unidos 80% del gas que consume. CFE y el sector privado emplean 60% de este hidrocarburo para generar electricidad que utilizan usuarios residenciales e industriales.