Por Alberto SARMIENTO REYES / HIPTEX

MEXICALI.- En los inicios de su ascendente carrera política, Marina del Pilar Ávila Olmeda era conocida como “Marina del Pilar, la hija de la doctora Marina del Pilar Olmeda García”, lo cual, hasta hoy, cuando la alcaldesa de Mexicali ha sido registrada como candidata a la gubernatura de Baja California le sigue llenando de mucho orgullo.

Orgullo que espera heredar para con su hija, “Marinita”, “lo más importante en mi vida, mi compañera más leal y que me ha acompañado en todas mis campañas”, y lo hará en la que habrá de realizar en los próximos meses en la contienda por la gubernatura de Baja California.

En los años recientes, el nombre de Marina del Pilar se ha hecho más conocido en la entidad. Su fulgurante y ascendente carrera política la ha llevado a ocupar, en unos cuantos años, una diputación federal, la alcaldía de Mexicali y aspirar, en los comicios de este año, a gobernar Baja California.

Por ello, suele presentarse como “Marina, la mamá de Marinita”.

La aún alcaldesa de Mexicali se define como una mujer comprometida con su ciudad, con el servicio público. “Siempre les digo: lo que ven es lo que hay”.

Marina del Pilar nació el 19 de octubre de 1985, estudió la primaria en el instituto Patria, la secundaria en el Instituto Corregidora, la preparatoria en “El Salva”, como conocen los cachanillas el Instituto Salvatierra, y la carrera de Derecho en el Cetys Universidad.

Sus padres, Marina del Pilar Olmeda García y José Ma. Francisco Ávila Hernández, ambos abogados de profesión, ambos catedráticos, ella en la UABC y él en el Cbtis 21, fueron quienes le formaron y trazaron en gran medida su futuro profesional y político.

Recuerda cómo, por ser hija única, sus padres la motivaron a tener actividades desde muy pequeña, más allá de las de su propia educación.

Mientras su padre le inculcó el amor a los deportes, e incluso incursionó en algunos como el futbol, voleibol, el que más le ha apasionado ha sido el de la charrería,   “los caballos son mi pasión, entre más broncos mejor”. Actividad que sigue practicando cuando le es posible.

Por el otro lado, su madre, le fomentó la actividad artística como el ballet, danza, gimnasia, la música, tocar el piano, por ejemplo.

De hecho, en la sala de su casa, donde tiene lugar la entrevista, nos muestra el piano que hace 30 años sus padres le regalaron y que aún toca, especialmente para quitarse el estrés.

También recuerda la exigencia de su madre para que tuviera buenas calificaciones en lo académico y en la cultura; mientras que su padre la impulsaba a la cultura física y “me apoyaba en todas mis locuras”.

La exigencia de su mamá, comparte, llegó al punto que en una ocasión le llevó una boleta con 99 y la respuesta fue que le había faltado una décima para el 100.

En casa, afirma, el 10 no era vanidad sino una obligación, aunque reconoce que a veces no llegaba y eso le costaba jalones de orejas.

Esa exigencia de su madre le inculcó el gusto por estudiar y prepararse. Fue así como tras concluir su carrera universitaria, viajó a Monterrey para realizar una maestría en Derecho Público en el Instituto Tecnológico y, al regresar, estudiar una segunda maestría, esta vez en Administración Pública en la UABC.

No es circunstancial su gusto por la política. Es precisamente en el seno familiar donde nace su pasión por esa actividad.

“Crecí viendo las noticias, no las caricaturas, en mi casa era lo que se veía, a mis padres les apasionaba todo lo público y de eso eran las conversaciones en la familia”, recuerda.

Pero cuando termina la preparatoria, no sabía que ese sería su futuro.  Se va a Canadá, un año a Montreal ha estudiar inglés y francés. Regresa a Mexicali y decide estudiar Odontología, porque dudaba entre estudiar Derecho o Medicina, sus pasiones las libertades y salvar vidas.

Es precisamente en Odontología, donde una maestra al observar su interés en ser jefa de grupo e involucrarse en actividades sociales de la escuela que le sugiere cambiarse de carrera, “se nota que traes ese amor por el Derecho y la política”.

Aún así, fue cuando estudiaba la maestría en la UABC y a la vez era maestra en la Facultad de Ciencias Sociales de la Máxima Casa de Estudios de la entidad, que conoció a varios alumnos muy inquietos, a los que apoyaba mucho porque le inspiraban esas ganas de participar.

Son esos alumnos quienes la invitan a sumarse a Morena.

Paralelamente, en la maestría tuvo como compañeros a militantes de distintos partidos políticos y fue uno de ellos que la invita a participar en el PRD “porque ya se le notaba lo izquierdosa”.

Para entonces ya había decidido a qué partido sumarse.

SE CONVIERTE EN “AMLOVER”

Su inclinación política también ha estado marcada por su entorno familiar, al convivir con dos posiciones opuestas. Por un lado la visión conservadora de su madre y la liberal de su padre, recuerda Marina del Pilar.

Antes de simpatizar abiertamente con el proyecto del presidente Andrés Manuel López Obrador, cuando en 2015 se afilió a MORENA, Marina del Pilar refiere que en una cena o comida, planteó el tema del plantón que AMLO encabeza en la avenida Reforma de la Ciudad de México tras las elecciones presidenciales del 2006.

Para su sorpresa, su madre justificó la acción de López Obrador al sostener que cualquier hubiese hecho lo mismo si lo roban la presidencia de la República como lo habían hecho con él.

“Está defendiendo lo que él cree”, remató su madre. Fue a partir de esa plática familiar que Marina del Pilar empezó a seguir con mayor interés las acciones de López Obrador.

Debieron pasar seis años para verlo como espectadora de un evento que tuvo lugar en el Tecnológico de Monterrey, donde lo escuchó en un debate y vio cómo los estudiantes estaban con él.  Y así, “poco a poco me fui haciendo seguidora de López Obrador”. Una “amlover”, “como nos dicen", dice entre risas.

Pero fue hasta finales del 2015 que conoció a López Obrador y no presume con él una relación de amistad, porque no la hay, “él es el presidente de México, es el líder político y moral de México en la época moderna… pero me identifica muy bien”.

Para entonces ya era militante de MORENA. Pero la primera vez que logró dialogar con él fue en 2016, en Ensenada, de cara al proceso electoral que se avecinaba.

Era una reunión privada con candidatos. Y recuerda: “ahí nos dijo,  no son los cargos, son los encargos, y no se preocupen si no llegan al Congreso, el Congreso es un antro, de lo peor, aquí lo importante es el proyecto, el proyecto es lo que va a transformar el País y poco a poco”.

El más reciente encuentro fue en diciembre del año pasado, cuando López Obrador visitó Mexicali.

Dijo haberse sentido muy contenta con esa visita “noté el cariño con el cual nos saludamos, ese abrazo de lejos pero que se sintió y me mencionó varias veces en su discurso”.

Y agrega: “siempre nos hemos visto con mucha alegría, mucho gusto, mucho ánimo y entusiasmo, sé que me respeta y yo a él”.

Es un cariño y un respeto mutuo, “sabe que hemos estado con él desde el inicio de esta lucha, para mí

es un gran líder, verlo recorrer 18 años el país, ese amor con amor se paga, es un hombre íntegro honesto”, sostiene, no sin dejar de emocionarse.

SU MADRE, SU EJEMPLO A SEGUIR

Pero en tratándose de ejemplos a seguir, Marina del Pilar no lo duda: su madre lo es.

Reconoce que ha habido muchas grandes mujeres a lo largo de la historia de la humanidad, “pero con mucha humildad, mi inspiración es mi madre”.

Y argumenta: “veo en ella una mujer única, que le ha entregado su vida al ejercicio público, de una manera ética, moral… ese es mi estándar, mi legado, el compromiso y ejemplo que tengo”.

También refiere que sus tías son grandes mujeres que la inspiran.

Su madre es un referente a la que no quiere decepcionar, dice convencida y decidida.

La define como una mujer de instituciones, siempre ha estado sirviendo en instituciones públicas, en la UABC, en el Instituto Electoral, ampliamente reconocida por su trabajo y dedicación.

“Cuando yo empecé mi carrera me decían Marina, la hija de la doctora Marina del Pilar, con mucho orgullo me encanta que se refieren a mi como Marina del Pilar Ávila Olmeda, hija de la doctora Marina del Pilar Olmeda García, me honra, me gusta, es un halago para mí”, afirma con orgullo.

Marina del Pilar refiere que al decidirse a participar activamente en política, recibió el apoyo total e incondicional de sus padres.

“Para mi madre fue más difícil procesar el que me haya decidido a participar en política, porque es muy institucional”, le recordó que habría de quedar marcada por el partido en el que militaría y le externó su preocupación por el hecho de ser mujer.

Por el otro lado, su padre la alentó de inmediato, “y que bueno que es con López Obrador”.

A la fecha, su madre, aunque se siente orgullosa de su trabajo, sigue preocupándose por su carrera política.

De su padre, dice que es un “panesote”, siempre ha sido muy consentidor. “Yo te cuido a la niña”, le dijo para alentarla y apoyarla en su decisión de participar activamente en la política.

LO MÁS IMPORTANTE QUE TENGO

Su apasionamiento por la política coincidió con el nacimiento de su hija: Marina del Pilar, “Marinita”.

“Yo siempre digo que soy Marina del Pilar, la mamá de Marinita”, dice de entrada la alcaldesa de Mexicali.

“Ella es mi motor, mi inspiración, ella cambió mi vida para bien, yo siempre había soñado con ser mamá.

Como soy hija única siempre me quedé con esa espinita de un hermano, por eso me encantan, me fascinan los niños”, dice emocionada. 

“Mi hija es lo más importante, es mi compañera más leal, me ha acompañado en todas mis campañas”.

Asegura que su hija es una niña muy politizada, porque le ha tocado estar con ella en tres campañas, en las que ha pedido el voto para su mamá.

“Para mi es muy importante que el día de mañana ella se sienta orgullosa del trabajo que hemos venido realizando por las mujeres cachanillas, así como yo me siento orgullosa de mi madre quiero que mi hija se sienta orgullosa de mí”, señala convencida.

CON MIRADA DE MUJER

Sobre su papel de madre y política, Marina del Pilar no se siente única, de entrada cuestiona la pregunta del reportero, “eso no le preguntan a los hombres”.

La pregunta fue el cómo combinar ambas responsabilidades: “como lo hacemos todas las mujeres que somos madres, la verdad no soy nada más yo, son todas las madres que  tienen un trabajo y también las que están su casa porque mantener una casa es un trabajo igualmente agotador”.

“Lo hacemos de todo corazón porque tenemos la capacidad”, sostiene.

En su caso, ya como alcaldesa de Mexicali, antes llevaba a Marinita a la oficina o algún recorrido por las colonias, pero ahora busca que algunas reuniones de trabajo se realicen en su casa para estar más tiempo con la niña.

Al ser cuestionada sobre algún acto de discriminación hacia su persona por su condición de mujer, Marina del Pilar toma aire, espera un par de segundos para reconocer haber vivido lo que llama “momentos incómodos” durante su carrera política por el hecho de ser mujer.

“Probablemente haya habido momentos incómodos, pero mi trabajo siempre lo hemos hecho de la mano de la gente, a mí me gusta rodearme de gente inteligente, de gente que me sume, y hemos hecho un buen equipo, de mucho trabajo, de mucha entrega”.

Luego agrega: “la verdad no puedo quejarme, mi partido, el ingeniero Bonilla, siempre me han dado oportunidades para participar y a mí me toca trabajar y hacer lo propio”.

Considera que “lo hemos hecho y creo que bien porque aquí estamos, y los resultados se han dado, hay muchos retos pero como todos… sí, sí ha habido situaciones incómodas pero hemos salido adelante”,

Reconoce que esas situaciones han venido tanto de hombres como mujeres.

“A veces pasa, lamentablemente son las mismas mujeres las primeras en atacar. Hay que cambiar eso, yo les digo: hay que brillar todas juntas, ver cómo podemos brillar, no bloquearnos”.

Refiere que en el Ayuntamiento de Mexicali integró un gabinete paritario, “me siento cómoda trabajando con hombres y mujeres, con gente inteligente, gente fregona, preparada, que me sume, que me multiplique”.

Por el contrario, prefiere alejarse de la gente tóxica, sean hombres o mujeres, porque le gusta estar rodeada de gente constructiva.

Esta forma de pensar la ha estado replicando en los cargos que ocupado, recientemente como alcaldesa de Mexicali se dio a la tarea de crear el Instituto de la Mujer, cuando la capital del estado era el único municipio que no contaba con ello.

Luego se creó el programa Fuerza Rosa para sacar a mujeres de los círculos de la violencia, "porque si se violenta a una mujer se violenta a una familia, a los hijos, a los hermanos, padres, a todos y eso tiene un impacto social”.

Está firmemente convencida que en el tema de la violencia contra las mujeres no podemos permitirnos aceptarlo, ni invisibilizarlo.

“Mi compromiso es de adeveras con las mujeres y con toda la sociedad”, apunta.

Marina del Pilar está consciente que por lo alcanzado en su carrera es un ejemplo para las mujeres de la entidad. 

Consciente de ello, pide las mujeres que “luchen por sus sueños, que los construyan, porque no se llega a ellos de la noche a la mañana, uno tiene que buscar las herramientas, los contactos, lo necesario para construirlos”.

Se sincera, y reconoce que ha habido momentos en los que ha debido renunciar a su lucha y ha tirado la toalla, “a veces es necesario hacerlo”.

Pero enseguida aclara: “a mí me ha pasado muchas veces, llego y digo hasta aquí llegué, pero luego me digo no, ni madres, la levanto y a seguir adelante”.

Es cuestión de tener una actitud positiva, constructiva.

Recordó que su primera elección a diputada local la perdió, le decían que nunca van dejar ganar a Andrés Manuel, “y mira ahora dónde estamos”.

Está firmemente convencida que lo único imposible es lo que no se intenta.

Comparte una experiencia: en la campaña de 2019, en una contienda electoral en la que fue sumamente atacada en su vida privada y su imagen física; en un recorrido por una colonia, una señora salió de su casa al oír la brigada de MORENA. Ya la estaba esperando al pie de su puerta y cuando la ve, emocionada la abraza y la besa,  y le dice: “Marina sé fuerte, nadie le tira piedras a un árbol que no da frutos”.

“Me emocionó porque ese día me habían atacado y había sido un día complicado y esa señora me levantó el ánimo”, recuerda aún emocionada.

Sigue siendo un ama de casa, por eso va al supermercado, “ahí se me acerca la gente a saludarme”.

Recientemente, comparte, realizó un viaje en avión y los pasajeros le pedían fotos y selfies, por lo que una sobrecargo les llamó la atención porque se estaba afectando el abordaje.

Ya durante el vuelo, la sobrecarga se le acercó para preguntarle quién era, por qué muchos de los viajeros se querían tomar foto con ella. Marina del Pilar le dio que era alcaldesa de Mexicali y se disculpó.

“Qué padre es que la quieran”, le contestó la sobrecargo.  

COVID-19, UN RETO INESPERADO

De su gestión como alcaldesa de Mexicali, Marina del Pilar refiere que por encima de todos el de la pandemia del Covid-19 ha sido el más difícil y doloroso que ha enfrentado.

La pandemia es el reto inesperado al que la humanidad entera, como sociedad y como gobierno se han tenido que enfrentar.

Su impacto en la salud, en lo económico es enorme y doloroso.

“Ese ha sido un gran reto, ver a tantas familias dolidas porque perdieron a uno o más de sus integrantes, eso te duele, te lastima”, dice Marina del Pilar.

Recuerda que muchas veces llegó tristísima a su casa, llorando y preguntándose qué está pasando. Sobretodo, refiere en esos días en que el sistema hospitalario de la ciudad estuvo al borde del colapso y no había camas para atender a tantos pacientes Covid.

La pandemia, sostiene, replanteó el papel del gobierno municipal en los temas de salud, asunto que antes se dejaba en manos del gobierno estatal y la Federación.

Por ello es que había que afrontar la situación con acciones y sanciones, cuidando el equilibrio entre proteger la salud y vida de la población para también la economía.

“Porque la enfermedad causa muerte, pero no trabajar, no haber ingreso también estaba matando a familias”, recuerda.

Destaca la entrega de dos millones de cubrebocas casa por casa, que se ha realizado gracias al apoyo de organismos e instituciones de amos lados de la frontera. 

Asegura que le fue muy doloroso ver que no se atendían a pacientes Covid, incluso se llegó a morir gente en los estacionamientos de hospitales porque no los querían atender.

Por ello, en la Dirección de Bomberos se preparó una primera unidad de respuesta, se creó una línea y se instaló una unidad para atender pacientes, con dos ambulancias, con el riesgo que implicaba para nuestros bomberos.

La propia Marina del Pilar fue alcanzada por la enfermedad pero con síntomas muy leves que le obligaron a un confinamiento de 12 días, pero sin impedirle seguir atendiendo los problemas del municipio.

El Covid-19 no ha afectado su entorno familiar, una tía suya estuvo luchando tres meses con el virus pero salió adelante.

Sin embargo, amigas cercanas han perdido a padres y familiares. Ha sido algo muy doloroso, en especial para quienes han pedido uno o varios integrantes de su familia.

Recordó que ha habido días en los que le llegan mensajes de amigos o gente que le conoce y le comparte que un pariente había dado positivo, que estaba hospitalizado.

Definitivamente, dice, la pandemia nos ha cambiado, nos ha enseñado a valorar lo más importante que tenemos que es la familia y la salud.

Recordó que ya casi tenemos un año con la pandemia, un año sin abrazos, sin estrecharnos la mano, sin un saludo, sin expresiones de cariño y amistad. Cosas que hoy valoramos y queremos retomar lo antes posible.

OTRA CAMPAÑA EN PUERTA

Apenas este fin de semana, Marina del Pilar se registró como candidata a la gubernatura de Baja California por MORENA, lo que implica que de nueva cuente esté en campaña.

De cara a este nuevo reto, la aún alcaldesa de Mexicali señala que su principal fortaleza es y será que trabaja con corazón y voluntad. 

“Soy una mujer seria, me gusta rodearme de expertos, vamos a hacer una campaña muy propositiva, seria, responsable, para sacar adelante la 4T en Baja California”.

Considera que pese a las diferencias en los municipios, Baja California es un Estado muy unido “cuando nos toca enfrentarnos a la problemática todos nos unimos”.

Además de atender su responsabilidad como alcaldesa, Marina del Pilar se prepara para la campaña que se avecina conociendo la problemática de la entidad en su conjunto.

También, ha empezado a hacer ejercicio para agarrar condición física y ponerse en forma para la campaña. Y adelanta a quienes le habrán de acompañar “me gusta caminar, me gusta hacer campaña, mucho cuidado, nadie me va a ganar en caminar, me apasiona estar en las colonias”.

Caminadora, poco cardio, algo de pesas y otras rutinas, que Marina del Pilar ejecuta desde 6 a 7 de la mañana.

Incluso, ya logró el principal respaldo: el de su hija.

Refiere que a lo largo de su carrera política el reto más importante que ha enfrentado es la separación de “Marianita”.

“Hay días, hay semanas, que la veo poco y aunque sea con calidad está consciente que debe ser también en cantidad, porque es una niña de siete años que lo necesita”, se confiesa.

“Me partía el alma despedirme de ella, porque eran tres días de no verla y aunque los fines de semana estaba en Mexicali también tenía que atender el trabajo”, recuerda sus días como diputada federal y tenía que viajar a la Ciudad de México.

“Me encanta trabajar, lo disfruto, lo hago desde los 19 años, pero separarme de mi hija ha sido el reto más grande y lo será para la campaña”, reconoce. 

“Estoy tratando de organizar la agenda, para que no sea tan complicado”, adelanta.

Comparte que hace unos días “Marianita” le dijo: “mami, no quiero que seas gobernadora, porque te voy a ver menos”, palabras que hicieron que “sintiera que se me partió el corazón”.

Tras hablar amplia y calladamente con ella, fue que tomó la decisión de ser candidata a la gubernatura del Estado.

“Le expliqué lo que viene y ella entendió”, luego le dijo “sí mami, yo te apoyo y le voy a decir a todas mis amigas que voten por ti”

En su momento evaluó esta situación, “yo quiero que el día de mañana ella se sienta orgullosa de que su mamá participó y está en trabajando por cambiar la vida de los bajacalifornianos, por consolidar un proyecto que encabeza el líder moral más importante de nuestro País, como lo es Andrés Manuel López Obrador”.

LOS PASATIEMPOS DE MARINA DEL PILAR

Realizando una actividad de tiempo completo, como lo es la alcaldía de Mexicali, Marina del Pilar comparte algunos de sus pasatiempos favoritos para despejarse de la presión que su cargo trae consigo.

A veces, dice, le entran rachas por tocar el piano que sus padres le regalaron hace 30 años. Saca alguna canción y otra.

Igualmente le encanta el karaoke.

Pero la práctica de la charrería, con albarda y todo, “me hace olvidarme y pudiera pasarme horas y horas”, pero no tiene el tiempo para ello.

Pero lo que más disfruta en sus ratos libres, es desempeñar su rol de madre.

“Me gusta jugar a las Barbie´s con mi hija, aunque apenas en diciembre me dijo que ya no le gusta y me quedé… cómo, cuándo me perdí de eso”.

Disfruta sentarse a hacer cubrebocas con ella, es una manera que trata de desconectarse de las presiones que enfrenta.

Otra cosa que disfruta con su hija es hacer Tik Tok.

“Me dan ´carrilla´ pero si a mi hija le gusta y me pide que lo haga… hago Tik Tok, los que me pida, porque soy mamá de una niña de siete años y quiero que tenga buenos recuerdos conmigo”.

Y aunque sabe que no siempre puede estar a su lado, revela: “si mi hija me llama por teléfono, le voy a contestar, esté haciendo lo que esté haciendo yo, porque es mi hija y sé que si me llama es porque es importante”.

“Ella siempre me ha acompañado, es mi principal compañía y principal apoyo y lo seguirá haciendo en la campaña”, dice convencida Marina del Pilar.