Tom Brady guió a los Bucaneros de Tampa Bay en su victoria 31-9 ante los Jefes de Kansa City en la edición 55 del Super Bowl
TAMPA BAY, ESTADOS UNIDOS.- Tom Brady lo hizo de nuevo. Con siete anillos de Super Bowl ganados, es el más grande de la historia.
En un encuentro en el que Mahomes y los Jefes de Kansas City prácticamente fueron borrados del emparrillado, los Bucaneros de Tampa ganaron el Super Bowl con un marcador 31-9.
El séptimo título de Tom Brady en el Super Bowl fue tan normal, pese a la mudanza al sur para jugar en un nuevo equipo y conferencia durante una pandemia.
Brady lanzó un par de pases de touchdown a su viejo amigo Rob Gronkowski y otro a su camarada Antonio Brown, y los Bucaneros de Tampa Bay dieron cuenta el domingo 31-9 a Patrick Mahomes y los Chiefs de Kansas City en su propia casa en el Super Bowl 55.
El mejor quaterback de todos los tiempos extendió su récord de conquistas del Super Bowl. Ahora son siete coronas en 10 intentos, el primero ajeno a la tutela del entrenador de los Patriots Bill Belichick.
Vigente más que nunca a sus 43 años, Brady eclipsó su récord del jugador más longevo que se consagra campeón del Super Bowl. También emuló a Peyton Manning como los únicos mariscales de campo que se han proclamado campeones de la NFL con múltiples franquicias.
Los Bucaneros conquistaron su segundo título y el primero en 18 años, el primero equipo que disputa la cita máxima del fútbol americano en su feudo, el cierre de una inusual y dura temporada que se llevó a cabo en medio de la pandemia de coronavirus.
La victoria de Tampa impidió a Mahomes y los Chiefs poder convertirse en el primer equipo que repite como campeón desde los Patriots de Brady en 2003-04.
Dos estilos muy diferentes de dos de los mejores quarterbacks de la liga se hicieron presentes en el encuentro de esta noche.
Tom Brady es el pasador de la bolsa de protección por excelencia, quedándose atrás de su línea ofensiva y lanzando el balón hacia todas partes.
Patrick Mahomes es el niño en el patio de la escuela, que se mueve para ganar tiempo antes de enviar el balón.
El estilo de Brady es un recuerdo al pasado, cuando los quarterbacks se acurrucaban bajo el centro para lanzar, retrocedían cuidadosamente en la bolsa para evaluar el campo, y luego revisaban sus progresiones antes de enviar el balón a un hombre abierto. Y si nadie está ahí, él está completamente feliz lanzando el balón hacia las gradas y preparándose para la siguiente jugada.
El enfoque de la vieja escuela tiene sentido. Brady, que pasó dos décadas en los Patriotas de Nueva Inglaterra, tiene 43 años después de todo.
Es un estilo que ha funcionado bien durante una carrera que seguramente llevará a Brady al Salón de la Fama. Ya tiene una cantidad récord de siete anillos de Super Bowl y junto con Peyton Manning son los únicos quarterbacks en ganar un campeonato con equipos diferentes.