CIUDAD DE MÉXICO.- El presidente Andrés Manuel López Obrador descartó tener un candidato favorito para liderar Morena, el partido político que lo llevó a la Presidencia de la República en las elecciones de 2018.

“No debo meterme en los asuntos internos de Morena y no tengo candidata ni candidato favorito. Por primera vez en mucho tiempo, el presidente no es un jefe de facción, sino del Estado”, indicó el mandatario en conferencia mañanera desde Palacio Nacional.

El Instituto Nacional Electoral (INE) dio a conocer el martes que recibió un total de 105 candidaturas a cargos a la dirigencia del partido Morena, 51 a la presidencia y 54 a la secretaría general.

Entre los aspirantes destacados para presidir Morena están el veterano político Porfirio Muñoz Ledo, los diputados Mario Delgado y Javier Hidalgo, el analista político Gibrán Ramírez, la expresidenta de Morena Yeidckol Polevnsky y el senador suplente Alejandro Rojas.

La elección de la presidencia y de la secretaría general se realizará entre el 26 de septiembre al 2 de octubre mediante encuesta abierta para quienes se declaren militantes y simpatizantes de Morena; el 4 de octubre el INE anunciará al ganador.

López Obrador manifestó que en los comicios intermedios de 2021 no permitirá que se “trafique con la pobreza” o se realicen actos que atenten contra la voluntad popular y, así, favorecer a la democracia.

“No voy a dejar que voten los finados, la alteración de actas, que es una vergüenza, porque México se distinguía, desgraciadamente, por la falta de democracia. Alguna vez vino (Mario) Vargas Llosa y dijo que México es la dictadura perfecta, porque se respetaba la Constitución en la forma, pero se violaba en el fondo”, indicó.