Desde El Rosario, poblado que se ubica al sur de San Quintín, notificando el hallazgo de varias liebres muertas a causa de esta enfermedad viral
ENSENADA.- Ante la enfermedad hemorrágica viral que está causando la muerte de liebres silvestres y conejos, la Secretaría de Economía Sustentable y Turismo del Estado (SEST) exhorta a la población a tomar precauciones y notificar estos casos.
Mario Escobedo Carignan, titular de la dependencia, confirmó que, en días pasados, a través de la Subsecretaría de Desarrollo Sustentable, recibió un reporte desde El Rosario, poblado que se ubica al sur de San Quintín, notificando el hallazgo de varias liebres muertas a causa de esta enfermedad viral.
Aclaró que, según datos del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), la Enfermedad Hemorrágica Viral del Conejo (EHVC) no puede ser contagiada a los seres humanos, pero sí es una enfermedad de rápida diseminación que está causando alta mortalidad en las producciones de conejos.
“De acuerdo al Senasica, recientemente se han presentado brotes en varios condados de Nuevo México, Texas y Arizona en los Estados Unidos, pero ya también hay casos del lado mexicano, en Chihuahua, Sonora, Baja California Sur y Baja California, por eso esta alerta sanitaria”, enfatizó el titular de la SEST.
Ante este escenario, el funcionario estatal pidió a la ciudadanía que, en caso de encontrar conejos enfermos con un síndrome hemorrágico y muerte súbita lo reporte inmediatamente a la Comisión México Estados Unidos para la prevención de la Fiebre Aftosa y otras Enfermedades Exóticas de los Animales (CPA) del Senasica.
Informó que la ciudadanía puede reportar este tipo de casos llamando al número de emergencia 800 751 2100 las 24 horas del día o a través de la aplicación “Avise”, que recientemente lanzó el Senasica para que toda persona involucrada con el sector animal pueda notificar en forma inmediata los casos sospechosos.
Por su parte, José Carmelo Zavala Álvarez, subsecretario de Desarrollo Sustentable, explicó que el riesgo o la alerta es para la población que tenga criaderos de conejos en Unidades de Manejo de Vida Silvestre (Umas), en granjas o en casas, a fin de que tome medidas sanitarias y pueda salvar a sus crías.
Tras recordar que esta Subsecretaría, a través de la Dirección de Recursos Naturales, tiene el deber de atender a la flora y fauna silvestre del Estado, Zavala Álvarez reiteró el llamado a la ciudadanía para que reporte los casos para así lograr un monitoreo efectivo que permita prevenir muchas muertes de fauna silvestre.
Una forma de prevenir que mueran muchos conejos o liebres es efectuar un buen monitoreo, porque si la ciudadanía ayuda reportando los casos, podremos ubicar dónde se están presentando y tener un mapeo, para así contener la propagación del virus y evitar que mueran muchos ejemplares de estas especies”, remarcó.
Si un buitre o un cóndor de California, explicó Zavala Álvarez, comiera una liebre muerta por EHVC, no contraería el virus, pero sí contribuiría a propagarlo, por eso es vital reportar los casos, para disponer sanitariamente de los cadáveres y residuos orgánicos, enterrándolos para que los depredadores no los lleven a otros sitios.
Insistió en que esta enfermedad es propia de la especie y no afecta al ser humano, por lo que instó a que quienes tengan criaderos de conejos los mantengan separados y con medidas sanitarias, porque ello es además un buen ejemplo de la conexión con la naturaleza y el respeto que debe tenerse por la vida silvestre.
Según lo informó el Senasica, el virus que está afectando a conejos y liebres se encuentra en secreciones y excreciones de los animales infectados (fluido ocular y nasal, orina y heces), por lo que puede transmitirse por contacto directo o por medio de personas, vehículos, material o equipo contaminado con el virus.
Asimismo, especificó que los signos clínicos de esta enfermedad son fiebre, depresión, falta de apetito, hemorragias oculares, secreción nasal espumosa sanguinolenta, dificultad para respirar, excitación, incoordinación, rigidez corporal y, finalmente, la muerte, después de 12 a 36 horas de contraída la enfermedad.
Respecto al modo de prevenirlo, el Senasica indicó que debe controlarse la importación de animales y productos, así como fortalecer las medidas de bioseguridad en las unidades de producción, además de reportar inmediatamente el hallazgo de conejos enfermos con un síndrome hemorrágico y muerte súbita.
Entre las recomendaciones a las personas relacionadas con la producción y comercialización de conejos, el Senasica sugirió que después de haber tenido contacto con animales silvestres enfermos o cadáveres de estos, las personas tomen un baño lo antes posible, además de lavar y desinfectar ropa y calzado.
Asimismo, mantener orden y limpieza en sus conejeras; restringir el ingreso de personal ajeno a su unidad de producción y colocar tapetes sanitarios al ingreso y salida de la zona de jaulas o conejeras, además de efectuar el lavado y desinfección de los vehículos y contenedores en los que transporte a los conejos y sus productos.
Finalmente, exhortó a evitar el ingreso de pie de cría o animales procedentes de otras granjas y, en caso de ser inevitable, mantenerlos en completo aislamiento y fuera de las instalaciones durante 15 días, revisando cualquier signo de enfermedad y manteniendo el chequeo constante de la temperatura de los animales.