TIJUANA.- Los Importadores de Mercancías Populares (IMPSA) registran pérdidas económicas por el cierre de sus negocios derivado de la pandemia, y se enfrenta ante la posible suspensión definitiva de algunos centros de trabajo, debido al desplome del 97 por ciento de las importaciones.

Así lo manifestó el presidente de esta agrupación y también vicepresidente secretario del Consejo Directivo de la Canaco, Carlos Hernández León, señalando que su actividad depende al 100% del abastecimiento de productos de Estados Unidos.

"Esto se ha convertido en un problema para nosotros porque la frontera permanecerá cerrada hasta el 22 de junio, además que aumentó el dólar respecto del peso y la nula venta en nuestros negocios, por lo que vemos un panorama delicado", expresó.

El grupo que se encuentra conformado por micros, pequeños y medianos comerciantes, conocidos como “segunderos”, apuntó, quienes se dedican a la venta de productos usados o de segunda mano, entre ellos, electrodomésticos, línea blanca en general, artículos para el hogar, mismos que al ser de bajo costo contribuyen a la economía familiar.

“Nuestra actividad no es esencial, de tal manera que tenemos que mantener cerrados nuestros negocios; son pequeños con capitales revolventes que difícilmente superan los 15 días, entonces, es difícil mantener un negocio en las circunstancias actuales”, consideró.

Carlos Hernández ejemplificó que al mes, IMPSA importa en promedio 4 millones de pesos, cantidad que ha disminuido hasta llegar a un 3%, mientras que un negocio en particular, en el mismo periodo, registró la pérdida de 8 mil dólares, situación que podría generar que los establecimientos no puedan surtirse.

Agregó que algunos afiliados al intentar trabajar y abrir sus puertas para recuperar un poco de sus ingresos, fueron sujetos de multas onerosas, lo cual se suma a los gastos operativos, pago de rentas, salarios, así como contribuciones fiscales.

“Es una situación que nos tiene un poco desconcertados, porque la autoridad debería ser comprensiva en este momento, y no ser coercitiva en el pago de impuestos, porque eso desanima”, indicó el líder comerciante de mercancías populares.

La sugerencia que hacen los comerciantes de este rubro a las autoridades gubernamentales, resaltó, es que las contribuciones se difieran o prorroguen por un tiempo, en lo que reinician sus actividades.

Finalmente, el presidente de IMPSA informó que a la fecha tiene contabilizados cuatro negocios que ya cerraron definitivamente sus puertas; otros han manifestado esa misma posibilidad o la desocupación de locales comerciales, cifra que podría aumentar en las próximas fechas con la ampliación del periodo de contingencia tanto en Tijuana como en el vecino país.