TIJUANA.- “Llegó el momento que el exgobernador “Kiko” Vega venga a rendir cuentas”, advirtió Jaime Bonilla Valdez al señalar que el cateo realizado en casa del exmandatario estatal, realizado por la Fiscalía General del Estado, obedeció a que tanto éste como su esposa, Brenda Ruacho, se han negado a comparecer para responder a las acusaciones que hay en su contra.

El gobernador de Baja California, Jaime Bonilla, recordó que cuando era candidato lo había anticipado: “Nosotros lo dijimos durante la campaña que íbamos a llegar e íbamos a esclarecer, y caiga quien caiga”,

Dijo que hay muchísimos señalamientos, particularmente contra el exgobernador de más de mil 700 millones de pesos de factura falsas que no han podido justificar.

“Los han citado, no han comparecido, a la señora esposa del exgobernador -Brenda Ruacho-, a la que se le acusa de desvíos de dinero del DIF, que es mucho más delicado todavía porque es dinero de los niños, de las familias, de programas sociales, se le citó y dijo que iba a venir y no vino, se le volvió a citar y no se apareció”.

Jaime Bonilla justificó la acción realizada por la Fiscalía: “las autoridades tuvieron que hacer lo que tenían que hacer, que era ir a ubicarlos y catear su casa”.

Aclara que “no es cacería de brujas, es justicia, y es lo que la gente todos los días me pide”.

Dijo que son ya seis meses armando la carpeta de investigación, “llegó el momento que el exgobernador venga a rendir cuentas él y sus colaboradores, unos once que han sido señalados involucrados en esos fraudes”.

Sobre la postura de la dirigencia panista, de que “Kiko” Vega debe comparecer, Jaime Bonilla recordó “se lo dije muchas veces a la gente del PAN, pueden esconder la mano con la que roban pero no podrán esconder la mano con la que gastan”.

Adelantó que desde ahora, en su transmisión diaria sobre seguridad y la emergencia sanitaria, habrá de estar informando del avance de las investigaciones que están abiertas contra el exgobernador “Kiko” Vega y su esposa.