Los investigadores señalaron que la regulación del sistema nervioso de los colágenos también podría desempeñar un papel en la longevidad.
Un gusano que comparte similitudes genéticas con los humanos cuenta con un sistema nervioso que controla su piel para protegerla de infecciones bacterianas, lo que tendría implicaciones positivas para la salud de las personas, destacaron investigadores en la revista Science Advances.
Científicos de la Facultad de Medicina Elson S. Floyd de la Universidad Estatal de Washington, en Estados Unidos, realizaron el hallazgo que pone en tela de juicio el señalamiento tradicional de que la cutícula de un gusano o la piel de un humano no responde a las infecciones, sin embargo, sí es parte de la defensa innata del cuerpo contra un patógeno.
Jingru Sun, autor del estudio, dijo que demostraron que durante la infección, el gusano Caenorhabditis elegans, que tiene una estructura relativamente simple, "puede cambiar la estructura de su cutícula (piel) y que la respuesta es controlada por el sistema nervioso”.
Sun y sus colegas utilizaron tecnologías como el silenciamiento génico y la técnica de edición genómica CRISPR, para evidenciar que un receptor acoplado de proteína G, el cual se une a un gen llamado NPR-8, regula los colágenos que son los componentes estructurales clave de la cutícula del nematodo.
A los gusanos a los que se les eliminó el receptor NPR-8 sobrevivieron más tiempo cuando fueron expuestos a los patógenos causantes de neumonía, salmonella e infecciones por estafilococos.
En tanto, la cutícula de los nematodos sin el receptor permaneció lisa en comparación econ sus similares silvestres, cuya cutícula se arrugó en respuesta a los mismos patógenos.
El investigador explicó que muchos patógenos "producen proteínas malas que intentan destruir esta barrera y establecer la infección". Sin embargo, los resultados demostraron que el sistema nervioso del gusano "puede detectar estos ataques y responder remodelando o fortaleciendo esta estructura protectora".
Los colágenos son las proteínas más abundantes que se encuentran en los mamíferos y la diminución en sus niveles está relacionada con el envejecimiento, explicó.
No obstante, en los humanos, la pérdida de colágeno puede crear problemas más allá de las arrugas antiestéticas, pues cada órgano cuenta con una matriz extracelular. Si esta "capa" está demasiado rígida o demasiado floja puede ser perjudicial para la salud.
Los resultados del estudio revelan que los colágenos juegan un papel importante en la defensa de la infección por patógenos.
Los investigadores señalaron que la regulación del sistema nervioso de los colágenos también podría desempeñar un papel en la longevidad. Su siguiente objetivo será comprender los mecanismos que están debajo de esta respuesta de defensa.