Con una población mundial que llegará a casi 10 mil millones de personas en 2050, la tierra por sí sola no nos alimentará; necesitamos también la producción alimentaria de origen acuático.

ROMA.- La contaminación plástica en los oceános, los efectos del cambio climático, la degradación del hábitat y la sobrepesca afectan también la alimentación de millones de personas en todo el mundo, afirmó el director general de la FAO, Qu Dongyu.

“Con una población mundial que llegará a casi 10 mil millones de personas en 2050, la tierra por sí sola no nos alimentará; necesitamos también la producción alimentaria de origen acuático. Pero debemos hacerlo sin comprometer la salud de los océanos y los ríos”.

El funcionario estimó que “millones de personas en todo el mundo dependen del pescado para su alimentación y para su subsistencia. Una persona consume cada año 20,3 kilos (cifra media per cápita) de proteínas de buena calidad y micronutrientes esenciales del pescado".

Al inaugurar ayer lunes en la sede del organismo el sismposio Internacional sobre la Sostenibilidad de la Pesca, refirió también que "a nivel mundial, más de una de cada 10 personas depende de la pesca para ganarse la vida y alimentar a sus familias”.

El directivo propuso tres soluciones para hacer más sostenible la pesca; primero reinvertir en programas de sostenibilidad marina y de agua dulce, segundo invertir en el crecimiento de los oceános y por último garantizar medidas de protección adecuadas para garantizar que el desperdicio alimentario en la industria pesquera sea menor.

"Necesitamos más voluntad política y más recursos para conseguirlo. No dejemos a ninguna región de los océanos detrás en nuestra búsqueda de la sostenibilidad. Si centramos nuestra ciencia, nuestro espíritu innovador, nuestras tecnologías, aseguraremos y protegeremos una de las industrias alimentarias más antiguas y menos valoradas”, estimó Qu.

El encuentro que concluye el próximo jueves, reúne a representantes del sector pesquero a fin de analizar el estado actual de la pesca. Entre los temas figuran la gestión de la pesca frente al cambio climático, el uso de tecnologías emergentes y las mejoras en la cadena de valor.

De acuerdo con la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) “una de cada tres poblaciones de peces marinos está sobreexplotada, en comparación con sólo una de cada 10 hace unos 40 años, mientras que la creciente demanda de peces de agua dulce está afectando a la sostenibilidad de la pesca continental”.

El organismo refirió que esa es una tendencia preocupante ya que la pesca en las regiones desarrolladas es cada vez más sostenible pues se reconstruyen las poblaciones de peces y mejoran las condiciones de trabajadores del sector, sin embargo la pesca en las regiones en desarrollo no mejora tan rápido.

"Esto está creando una peligrosa brecha de sostenibilidad. Tenemos que invertir esta tendencia si queremos alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible".