La osteoporosis se caracteriza por disminuir la resistencia de los huesos en cuanto a densidad y calidad, elevando así el riesgo de fractura, el cual es mayor todavía si no se trata de manera oportuna y adecuada.
Por: Flor Goche
La osteoporosis, enfermedad que vuelve frágiles los huesos, va en aumento y afecta al 20 por ciento de la población mayor de 50 años en México, especialmente a las mujeres, informó Carlos Alberto Lozada Pérez, médico adscrito al departamento de Reumatología del Instituto Nacional de Rehabilitación.
En el marco del Día Mundial de la Osteoporosis que se celebra el 20 de octubre, detalló que se calcula que hay dos millones de mujeres con esa enfermedad en el país y a nivel mundial la cifra es de 200 millones.
El reumatólogo Lozada Pérez refirió también que hay pocos densitómetros en el país, que son las máquinas que proporcionan la prueba de densidad ósea más precisa, por su alto costo que es de entre 50 y 70 mil dólares.
Ejemplificó el caso del Instituto Nacional de Rehabilitación, que es un hospital de tercer nivel de atención, donde hay sólo dos densitómetros, mientras que los centros de salud carecen de ese equipo.
La osteoporosis se caracteriza por disminuir la resistencia de los huesos en cuanto a densidad y calidad, elevando así el riesgo de fractura, el cual es mayor todavía si no se trata de manera oportuna y adecuada.
El presidente de la Asociación Mexicana de Metabolismo Óseo y Mineral, Rolando Espinosa Morales, apuntó que “aunque el hueso es un órgano en el que repercuten más de 200 enfermedades, la más prevalente es la osteoporosis”.
Además, indicó que se trata de una enfermedad de altos costos económicos para los pacientes y los sistemas de salud, como prueba mencionó que se estima que para 2050 el gasto mundial anual será de 132 mil millones de dólares.
Esto es así, explicó, porque las fracturas por fragilidad en sitios como cadera, vértebras, pelvis, húmero y muñeca pueden causar incapacidad y pérdida de independencia, además de que son muy caras las operaciones quirúrgicas y las prótesis que se emplean para tratar algunos casos de fractura.
Asimismo, expuso que dado que el hueso es dependiente de las hormonas es común que los casos de osteoporosis se manifiesten a partir de los 50 años, cuando las mujeres están en el periodo de climaterio.
Sin embargo, señaló que hay casos de osteoporosis en poblaciones juveniles e incluso en infantes, pero con el matiz de que se presentan asociados a otras enfermedades que condicionan la debilidad de los huesos, como diabetes, artritis, lupus y problemas renales.
Ya que la osteoporosis no duele por sí misma, lo que molesta es la presencia de fracturas, la disminución en la resistencia del hueso puede pasar desapercibida, por lo que el también densitometrista pidió a la población adulta estar muy atenta de manifestaciones como pérdida de altura, cuerpo encorvado y deformidad.
“La osteoporosis es tratable, pero es fundamental tener el diagnóstico lo más temprano posible para que esa masa ósea que se ha perdido a lo largo de los años no sea tanta y haya posibilidad de restaurar la calidad y la resistencia del hueso”, mencionó.
Abundó que el cuidado de los huesos empieza desde la niñez con hábitos como buena alimentación, práctica de ejercicio y un buen aporte de calcio y vitamina C en la dieta cotidiana.
El integrante del Colegio Mexicano de Reumatología consideró que, si bien el sistema de salud pública del país cuenta con el personal y la infraestructura necesaria para el tratamiento de la osteoporosis, le falta actualización en cuanto a conocimientos recientes para después diseminar la información a todo el personal médico. (Notimex)