La secretaria de Gobernación, dijo que se consideraría endurecer las medidas de seguridad en la frontera sur de México.
CDMX.- La titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), Olga Sánchez Cordero, sostuvo que nadie puede violar la ley y la soberanía del país, por lo que no se puede permitir que los migrantes centroamericanos irrumpan en territorio nacional, en algunos casos de manera agresiva.
Consideró una coincidencia que justo cuando una delegación mexicana permanece en Estados Unidos en una negociación para abordar temas económicos y migratorios, una nueva caravana de centroamericanos ingresó ayer al país, misma que fue retornada a sus países de origen.
Indicó que han sido detectadas diversas organizaciones que se encargan de convocar, a través de redes sociales, a centroamericanos para ingresar al país en caravanas, lo que se suma a la entrada “hormiga” por la frontera entre México y Guatemala.
“No me cansaré de decirlo, lo que queremos es una migración ordenada, segura y regular... pero esta irrupción violenta en el puente de Chiapas, me parece un poco coincidente por decir lo menos”, subrayó.
En el marco de la reinstalación del Sistema Nacional de Prevención, Atención, Sanción y Erradicación de Violencia contra las Mujeres, dijo que por el momento no tiene información suficiente del avance de las negociaciones comerciales que encabeza el canciller Marcelo Ebrard en Estados Unidos.
Sin embargo, dijo que ante el reporte de las autoridades norteamericanas respecto a que 100 mil personas han entrado a territorio mexicano en un mes, sobre todo provenientes de Honduras y Guatemala, México podría endurecer sus medidas de seguridad en la frontera para evitar la llegada de más migrantes.
“No entiendo por qué se dice que violan los derechos humanos cuando lo que queremos es regular a la población migrante para darles, poderles ofrecer servicios, para que hagan valer sus derechos humanos”, expresó.
Recordó que el presiente Andrés Manuel López Obrador siempre ha pensado en atender las causas de la migración, bajo la premisa de que nadie migra por gusto sino por necesidad, por lo que se mostró a favor de establecer un programa de desarrollo en los países expulsores y en el sureste de México.
Estados Unidos siempre será muy atractivo por las condiciones de su desarrollo y por las leyes de asilo atractivas, sobre todo para las familias que expresen sentir miedo en sus países de origen, agregó.