Redacción/ HIPTEX

TIJUANA.- “Los que no pensamos saltar el muro no pensamos en el sueño americano, que no es dejar la familia botada, sino buscar mejores condiciones de vida”, considera Luis, un hondureño asilado en Tijuana.

Muchos centroamericanos de la caravana migrante que salieron de sus países de origen, principalmente Honduras, huyendo de la pobreza y la violencia, no ven a Estados Unidos como la nación de sus sueños y cada vez están más conscientes de que el sueño americano no existe.

Lo han comprobado por el discurso oficial de Estados Unidos, que no quiere abrirles la puerta al asilo político que miles anhelan, por la larga espera para acceder a una ficha de entrevista migratoria y debido a las enérgicas medidas de reforzamiento de la frontera que está tomando el gobierno norteamericano a raíz de su llegada en masa a esta región.

Luis, un joven hondureño que dejó a su familia en su tierra y no sobrepasa los 30 años de edad, comparte con HIPTEX que ya tiene regularización migratoria en México.

“Ese era el plan de muchos de los que no pensamos saltar el muro”, insiste el joven delgado que muestra convencimiento sobre hacer todo lo necesario para mejorar su futuro.

Considera que México es un país muy bueno con muchas oportunidades, por lo que para él y otros se ha convertido en la opción de trabajo y residencia que no obtuvieron en sus países de origen.

“Lo que pensamos muchos es movilizarnos; no quedarnos en Tijuana”, afirma que él por lo pronto se movilizará a otro Estado, Nuevo León, para quedarse trabajando en México.

Hay que independizarnos, nos han ayudado mucho, Tijuana ha estado con nosotros de principio a fin, pero es tiempo de buscar el horizonte, agrega.

Luis celebra tener ofertas de empleo. Regularizarse en México cuesta mucho y nosotros ahora lo tenemos de paso, hay que aprovecharlo, concluye. (lgs)