Es un contrasentido buscar la movilidad con el programa “Respira” y al mismo tiempo se proyecte introducir en el Bulevar Agua Caliente, transporte público que consume diésel

TIJUANA.- Una nueva versión de transporte público moderno, no puede utilizar diésel como combustible, ya que es un carburante sucio, no sustentable y con niveles más altos de contaminación que la gasolina; su utilización en unidades de transporte público puede calificarse como un retroceso.

Ante la posibilidad que las nuevas unidades de transporte que recorrerán los bulevares Agua Caliente y Díaz Ordaz en Tijuana, empleen diésel como combustible, José Carmelo Zavala, Director del Centro de Innovación y Gestión Ambiental A.C. (CIGA), dijo que es un contrasentido buscar mejorar la movilidad y la calidad del aire con el programa “Respira” y al mismo tiempo se proyecte introducir transporte público que consume diésel que genera  óxido de nitrógeno, óxido de azufre y partículas menores a 2.5 micras.

“Reconocemos que el IMOS, es dirigido por un experto en temas de movilidad, pero también consideramos que debería de apoyarse con expertos en gestión política que le ayuden a dirimir las diferencias y a convocar a todos los actores involucrados en este tema. Cierto que las empresas o grupos de transportistas en ocasiones llegan a ser un problema, pero no los pueden omitir, se tiene que tomar en cuenta para dar solución”.

El ingeniero bioquímico, se preguntó ¿Cómo creer en una nueva ruta de transporte público cuando aún no se termina el análisis forense del Sistema Integral de Transporte de Tijuana (SITT)?, un sistema que no ha terminado de morir, dijo, que se encuentra abandonado y con un derroche de recurso público y hasta el momento sin que nadie tome la responsabilidad.

José Carmelo Zavala apuntó que esta realidad, no la merecen Baja California y Tijuana, por lo que se debe implementar un sistema de bajas emisiones, con el uso de gas natural como se proyectó el SITT originalmente, o cero emisiones con sistemas eléctricos, como actualmente funcionan líneas de transporte en las Ciudades de México, Mérida o San Diego California; solo así, este proyecto que sustituirá a los taxis Rojo y Negro, se podría considerar una ruta moderna y encaminada mejoramiento de la calidad del aire.

“No es posible que vayamos con una nueva y brillante idea y los ciudadanos podamos seguir pensando que es posible ¿Qué garantía tiene la ciudadanía, de que el recurso público se use de verdad?, ¿Qué se gaste con responsabilidad?, si vemos un SITT tirado”

Por último, Zavala Álvarez, dijo que ojalá y el poder de convocatoria sea suficiente e incluya a todos los actores importantes en el tema de transporte público y sobre todo que los acuerdos y las políticas públicas, se tomen pensando en mejorar la salud pública. La calidad del aire de Baja California, empeorará con el uso de diésel.