La región del Ártico ha dejado de almacenar y capturar carbono como lo hizo durante miles de años.

LONDRES.- La región del Ártico ha dejado de almacenar y capturar carbono como lo hizo durante miles de años, debido a que que el calentamiento climático está propiciando la descomposición microbiana de la materia orgánica del suelo y con ello la liberación de dióxido de carbono (CO2), reveló un nuevo estudio.

Científicos del Centro de Investigación Woods Hole, Estados Unidos, y del Departamento de Biología de la Universidad Estatal de San Diego, evaluaron las pérdidas de carbono durante las temporadas de invierno y encontraron que esas emisiones parecen estar agregando más CO2 a la atmósfera cada año de lo que absorben las plantas y los árboles de la región.

La cantidad de CO2 liberada en invierno no se conoce con precisión, por lo que no ha sido bien representada por modelos de ecosistemas o estimaciones empíricas, así que los investigadores sintetizaron observaciones regionales in situ del CO2 de los suelos árticos boreales para calcularla.

De acuerdo con su investigación, publicada en la revista británica especializada Nature Climate Change, estimaron una pérdida contemporánea de 1.7 millones de toneladas métricas de carbono de las regiones de permafrost ártico durante cada invierno de 2003 a 2017.

En el mismo periodo, también descubrieron que solo un promedio de 1.0 millones de toneladas métricas de carbono fueron absorbidas por la vegetación durante las temporadas de verano. Es decir, “la pérdida es mayor que la absorción promedio en esta región”, indican los investigadores estadunidenses.

Advierten que al considerar las predicciones de condiciones más cálidas en la región hasta el año 2100, las emisiones de CO2 en invierno aumentarán un 17 por ciento en un escenario de mitigación moderado y un 41 por ciento en el de las emisiones actuales.

“Nuestros resultados proporcionan una línea de base para las emisiones de CO2 de invierno de las regiones terrestres del norte y a menos que se actúe con determinación para frenar el calentamiento global no se podrá compensar la liberación-absorción de carbono”.

En la tendencia actual, la región de Ártico está cambiando de ser un “sumidero” neto de CO2 a ser una fuente neta de emisiones, lo cual a su vez empeorará el cambio climático, prevén los investigadores en su artículo.

El permafrost es el suelo congelado rico en carbono que cubre aproximadamente una cuarta parte de la superficie terrestre del hemisferio norte; abarca vastas regiones de Alaska, Canadá, Siberia y Groenlandia. Su importancia radica en que almacena más carbono del que los humanos han liberado a través de la combustión de combustibles fósiles.

Estos suelos congelados han mantenido el carbono encerrado de forma segura durante miles de años, pero el aumento de las temperaturas los está descongelando y liberando esos gases de efecto invernadero.