El grupo empresarial respalda lo dicho por el gobernador y le pude que haga lo mismo que en Tijuana.

ENSENADA.- Así como el gobernador del estado, Francisco Vega de Lamadrid, negó la intención de solicitar un incremento a la tarifa del agua en Tijuana, debe considerar seguir la misma ruta en Ensenada, consideró el Consejo Consultivo Económico de Ensenada.



Hace unos días el mandatario estatal rechazó la intención de solicitar un aumento a la tarifa del servicio hídrico en la ciudad fronteriza, mucho menos en un 66 por ciento como se publicó en la prensa.



Carlos Ibarra Aguiar, presidente del organismo empresarial, dijo que si bien en unos meses la planta desalinizadora de agua de mar comenzará a operar y suministrar el líquido a los habitantes de la ciudad, los consumidores no deben pagar por años de malas gestiones y erróneos diseños de políticas hídricas.



En ese sentido, recordó que Ensenada tiene las tarifas comercial e industrial más caras de todo el país, inclusive por encima de Tijuana, con 44.96 pesos por metro cúbico, según datos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).



Referente a la tarifa doméstica, la misma fuente señala que se ubica en los 14.23 pesos por metro cúbico; un aumento en los precios irá en detrimento de la calidad de vida de los ensenadenses, además de inhibir la actividad industrial, opinó Ibarra Aguiar, presidente de Consulten.



La mala administración de la paraestatal ha derivado en una crisis operativa. La sobreexplotación de los mantos, la mala planeación, gestión, diseño y ejecución de políticas hídricas son algunos de los factores que explican la situación actual de desabasto en el municipio, insistió Carlos Ibarra.



En gran medida el problema tiene su origen en la esfera gubernamental; por ello, reconoció el nombramiento del ingeniero Carlos Loyola Peterson como director de la Cespe, quien posee una visión más técnica que política de las necesidades y soluciones al problema.



En ese afán, confiamos en que el ingeniero Loyola Peterson pueda darle una nueva dinámica a la dependencia que encabeza, sobre todo que la haga eficiente en lo financiero y operativo.



Coincidimos en que no hay agua más cara que la que no se tiene, sin embargo, reiteramos que la problemática del agua en Ensenada se debe, en gran medida, a los yerros de los gobiernos. Es tiempo de corregir, finalizó.