El Revolucionario Institucional se manifiesta a favor de una gubernatura de seis años y no la de tres que pretende Morena
TIJUANA.- La llamada “Ley Bonilla II”, es tan arbitraria que ni siquiera ha logrado el consenso al interior de Morena, lo que demuestra que el alabo legislativo que prepara es “un capricho” más del gobernador Jaime Bonilla Valdez, estableció la dirigencia estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI)
“El PRI está atento al desarrollo de la ´Ley Bonilla II´ o ´Ley Capricho´, como también le llaman, ya que es un tema de interés nacional. La iniciativa deberá pasar por el proceso legislativo correspondiente ante el Congreso con mayoría calificada y posteriormente, si se aprueba, se turnará a los cinco Ayuntamientos por ser una reforma constitucional”, mencionó el líder del PRI en el estado, Carlos Jiménez Ruiz.
Además de los partidos de oposición, organismos empresariales, sociedad civil y los propios miembros de su partido, como los diputados federales Martha Patricia Ramírez Lucero e Ismael Moreno Gil, así como los dirigentes nacional y estatal han expresado su rechazo a la iniciativa promovida por la diputada local Monserrat Caballero, dijo el líder priista
“La iniciativa es tan arbitraria que hasta los mismos morenistas la reprueban públicamente. Lo que nos deja en claro que ni siquiera al interior de su partido hay consenso. Se trata pues, de otro capricho de Bonilla y de su equipo, una revancha por no haber logrado imponer un gobierno de cinco años”, acotó Jiménez Ruiz.
Al finalizar, el dirigente estatal del tricolor nuevamente reclama y exige a los legisladores estatales socializar sus proyectos antes de someterlos al proceso parlamentario.
“Reiteramos nuestro llamado a los diputados para que, antes de presentar sus iniciativas ante el Congreso, escuchen a la sociedad y también para que no se extralimiten en la facultad de sesionar de manera remota para dar albazos legislativos”, concluyó.
Carlos Jiménez Ruiz, recibió el respaldo de Guadalupe Gutiérrez Fregozo, secretaria general del CDE, y los dirigentes municipales en Ensenada, Sergio Almazán Olachea; en Mexicali, Roberto Martín del Campo; en Rosarito, Cristian Medina Peña; en Tecate, Javier Pérez, y en Tijuana, Edna Pérez Corona; además del diputado David Ruvalcaba, quienes expresaron su desaprobación ante el avance de la reforma constitucional que permitiría una gubernatura única para el periodo 2021-2024.