“Sería denominación de origen”, bromeó anoche en su participación como invitada a la inauguración del programa Jhon & Sabina, de Canal Once.

CDMX.- La marihuana originaria mexicana es de las de mejor calidad en el mundo. “Sería denominación de origen”, dijo, la última frase entre risas, la secretaria de Gobernación Olga Sánchez Cordero, anoche en su participación como invitada a la inauguración del programa Jhon & Sabina, de Canal Once.

Cuando su interlocutor John Ackerman mencionó que “la marihuana es un producto nacional”, Sánchez Cordero agregó: “aparte de la mejor calidad. Además quiero decirte, nuestra marihuana originaria es de las mejores marihuanas de la mejor calidad en el mundo. En el mundo, entonces. Así, sería denominación de origen (risas)”.

La aseveración de la encargada de la política interna en México, la mujer con el cargo más alto en el gobierno del país y la segunda en el mando Ejecutivo apenas atrás del presidente Andrés Manuel López Obrador, provocó risas y asombro de los asistentes al foro, estudiantes del Instituto Politécnico Nacional (IPN) al que pertenece Canal Once.





Tradicionalmente y ancestralmente nuestros indígenas consumían peyote, hongos, marihuana, continuó.

“Tenemos que ir por partes y caminando en terreno muy firme. Primero la marihuana”, indicó ante John Ackerman y Sabina Berman.

Juan Ramón de la Fuente que está en la misma línea dijo una cosa muy puesta en razón: no es lo mismo la Ciudad de México que el Centro de México, donde la población es más conservadora, por lo que la para la regulación sería importante darle sus tiempos a la población de acuerdo al Estado, expuso.

Recordó que el expresidente Lázaro Cárdenas (1934-1940) en su tiempo pretendía regular la marihuana, pero vino la presión internacional para la política prohibicionista “que lo único que ha traído es desgracia”.

Sánchez Cordero criticó que en Estados Unidos, a nivel federal, la marihuana siga siendo ilegal, pero 25 Estados tengan regulación para fines medicinales y un pequeño porcentaje para fines lúdicos, lo que es “una incongruencia”.

Subrayó que en México, la regulación de la marihuana si no va a traer la paz, cuando menos coloca en el camino correcto para llegar a pacificar al país.

“Va a disminuir mucho la violencia; presenté la iniciativa antes de dejar el Senado de la República, con el conocimiento y consentimiento del presidente”, destacó.

Hay cientos de jóvenes que por haberse excedido un poco más del gramaje permitido en la legislación están en prisión; cuando menos ellos van a obtener su libertad, acotó Sánchez Cordero.

Aclaró que no es legalización sino regulación en la producción, distribución y comercialización a través de sociedades cooperativas en comunidades que han padecido la guerra contra el narcotráfico y han sido criminalizadas.

Una de las intenciones es que por principio de justicia social, comunidades que han sido criminalizadas tengan la posibilidad de ser las primeras en pagarles esa deuda.





Aclaró que vender marihuana a menores de edad debe ser una conducta criminalizable. La penalización y criminalización sería la venta a menores de 18 años, insistió.

Psicólogos y psiquiatras opinan que lo óptimo sería empezar a fumar marihuana después de los 30 años por la madurez del cerebro, pero no se criminalizará a quienes la consuman siendo mayores de edad sino a quienes la vendan a menores. (lgs)