“Estoy en una grupo de rap y hago tatuajes, ésa es mi profesión. Tengo aproximadamente 8 años en esto. Es de lo que vivo ahorita, es mi pasatiempo, es mi hobbie.

Desde más chico me gustaba hacer grafiti, también dibujar y un día surgió la ocasión de hacer un tatuaje y de ahí me empezó a gustar desde la secundaria y pues nunca lo dejé. La verdad nunca pensé en alguna otra profesión, como dije, desde la secundaria tengo ese gusto por tatuajes y por dibujar y sí, es tanto como mi profesión como mi pasatiempo y la verdad no tengo ningún ídolo, porque yo soy mi propio ídolo.

La discriminación la sufrí bastante tiempo y hasta la fecha hay quienes aún creen que por tener tatuajes eres mala persona. Pues es que esa gente todavía vive en tiempos atrás, se quedaron estancados en su época y no quieren ver la realidad del ‘ahora’.

Me llegó a pasar que yo caminaba en dirección con algunas personas, y ellas se cruzaban la calle; igual con la policía, solamente te ven tatuado y creen que estás en malos pasos o que eres un vago.

No creo que los tatuajes deban influir en el futuro de un joven para conseguir un trabajo, no depende de cómo te veas, sino de cómo hagas las cosas y la pasión que tengas en lo que haces. No se dan cuenta que uno es normal como cualquier otra persona, sólo porque los tatuajes te ven diferente, pero todos somos iguales.”