Para los comicios locales del 2019, los hombres de negocio quieren que se elija gobernador para cinco años en lugar de dos como lo establece en estos momentos la ley.

Por Alberto Sarmiento Reyes / Hiptex
Son varios millones de pesos los que están de por medio. También la estabilidad política y financiera del estado. Pero sobre todo, la inversión que los empresarios deben hacer en toda campaña electoral.

Son tres razones de peso y de pesos que los más destacados hombres de negocios en la entidad pusieron en la balanza para impulsar, sin aparecer en la escena, una modificación constitucional en la ley electoral de Baja California para que en el 2019 se elija gobernador para un periodo de cinco años y no de dos, como lo establece la legislación vigente.

Es sabido que en cada elección, ya sea a presidente de la república, a gobernador o a alcalde, los partidos políticos y sus candidatos pasan la charola entre los empresarios. Y éstos, prácticos al fin, tratan de quedar bien con todos, aunque seguramente no en la misma proporción porque al final se trata, en muchos de los casos, de una apuesta y por consiguiente quien luce como favorito recibe más apoyos.

“Invertir” o “gastar” en el 2019, para un gobernador que habrá de durar en el cargo dos años, no resulta atractivo para los empresarios, porque en dos años deberán de hacerlo nuevamente, aunque ahora sí sea para un periodo de seis años.

La propuesta que empezaron a impulsar a finales del año pasado, apenas empieza a tomar forma. Ayer, Rodrigo Martínez Sandoval, consejero electoral del Instituto Estatal Electoral de Baja California, propuso que en las elecciones en el 2019 se elijan autoridades por cinco años y no por dos como está estipulado, y volver a votar hasta el 2024 ya para un periodo, en el caso de gobernador, de seis años.

En su argumento, el funcionario electoral asegura que su propuesta busca evitar que haya gastos millonarios al haber dos procesos electorales en un periodo muy corto como 2019 y 2021.

Basta recordar que los comicios locales del 2016, en la que no estuvo en juego la gubernatura, solo las cinco alcaldías y los 17 distritos electorales, el proceso electoral tuvo un costo de 111 millones de pesos.

Se emitieron en total 715 mil 794 sufragios, por lo que cada voto tuvo un costo unitario de 115.2 pesos. El costo promedio a nivel nacional ese año fue de 122.8 pesos.

Los empresarios también piensan lo mismo, pero con sus aportaciones a las campañas políticas. Pero también en los hombres de negocios hay motivos que van más allá del dinero. Se trata de la estabilidad social.

La creciente ola de inseguridad que aqueja a la entidad, los tiene muy preocupados. Consideran que un gobierno estatal de dos años no garantiza estabilidad ni económica ni social.

Cuando apenas lleve un año en el cargo, ya estaría en marcha el proceso para su relevo. Tendría muy poco tiempo para dar respuesta a problemas torales como la seguridad.

Si la transición en las actuales alcaldías ha traído un incremento en los índices delictivos, los hombres de negocio ven con preocupación lo que pudiera pasar en el relevo de una gubernatura de dos años. Y lo mismo piensan en cuanto a las alcaldías, pero ese tema es más complicado por la posibilidad de una reelección en puerta.

Ampliar la siguiente gubernatura a cinco años sería más atractiva para los partidos políticos, para los candidatos y para los electores, han considerado los más encumbrados hombres de negocio de la entidad… y también serían menos riesgosas para su inversión.