Una alianza con Acción Nacional, porque ya López Obrador dijo que en el 2018 no va con el PRD, parece ser la única oportunidad que tienen los perredistas de Baja California de sobrevivir.

Por Alberto Sarmiento Reyes / Hiptex
Aunque la elección en el Estado de México representó para el Partido de la Revolución Democrática (PRD) una importante recuperación, al colocarse como la tercer fuerza política en la entidad gobernada por Erubiel Ávila; en Baja California el perredismo no tiene ni pies ni cabeza, ni rumbo, ni liderazgo.

Abraham Correa y Omar Sarabia, ambos del llamado grupo de “Los Chuchos”, no están reconocidos en la dirigencia estatal y secretaría general que ostentan respectivamente por el CEN del PRD, por no haber logrado el 5% de la votación que marcan los estatutos, apenas si llegaron a un sospechoso 3%.

El cuestionado par, ahora ubicado dentro de la corriente “chuchi-galileos”, por pertenecer a la corriente nacional de Jesús Zambrano, Jefe de “Los Chuchos” y Guadalupe Acosta Naranjo a la recién creada corriente política del PRD denominada “Galileos”, navegan en la incertidumbre.

Hace unos meses, un emisario de la dirigencia nacional del PRD visitó la entidad y anunció que el CEN perredista nombraría a un delegado nacional para que se haga a cargo del partido en Baja California en tanto no se nombre a la nueva dirigencia.
La única posición política importante que ostenta el PRD en Baja California, lo ocupa la diputada local Rocío López Gorozave, quien se desmarcó prácticamente del partido del sol azteca una vez que llegó a la curul y ha definido su línea con la cuestionada dirigencia de Correa Acevedo.

“Yo ya les pagué”, ha dicho en más de una ocasión la legisladora ensenadense para referirse que ha decidido no someterse al control que Abraham Correa acostumbra hacer de los representantes populares del PRD.

Así que el PRD se ha quedado sin interlocutor con el gobierno estatal, luego que fracasara Abraham Correa en su intento por ser el negociador de posiciones a nombre de la diputada Rocío López. Hoy, es ella la que hace los amarres sin reportar absolutamente nada al PRD, no estatal ni nacional. “A mi me costó la candidatura”, sostiene cuando se le pregunta su militancia.

Además, el PRD navega en sendas demandas de la autoridad electoral local, en las que están de por medio varios millones de pesos debido a que la ex regidora Cuquita Lugo, tesorera del partido, no ha podido comprobar los dineros de las prerrogativas.

El partido no tiene oficinas, tampoco hay trabajo político… y el dinero sigue sin aparecer.

Alejandro Ruiz Uribe, quien en su momento asumió por herencia las riendas del PRD, no se sabe si sigue siendo perredista, no solo por las críticas hacia el partido del que fue dirigente y lo catapultó a varias candidaturas, todas las cuales terminaron en fracaso; sino porque no escatima elogios y apoyos a Andrés Manuel López Obrador, el virtual candidato presidencial por el Movimiento de Regeneración Nacional (PRD).

Una figura destacada dentro del PRD lo es sin duda el ex diputado local Roberto Dávalos, que dejara constancia de su trabajo en la anterior legislatura, y que de momento ha decidido mantenerse al margen de las disputas internas y está a la espera de la llegada del delegado nacional para poder reagrupar su fuerza y cómo definirá su corriente, Vanguardia Progresista, que comanda Miguel Àngel Mancera Espinoza, en el tema de alianzas y candidaturas del 2018.

Filiberto Posos, de la corriente ADN, del señor de las ligas, René Bejarano, de nuevo se quedó fuera de la jugada en Ensenada y en donde le comieron el mandado los candidatos independientes, el Partido del Trabajo y MORENA, que sí avanzaron con espacios por lo menos en el ayuntamiento que encabeza el priista Marco Novelo.

En Mexicali, falleció uno de los protagonistas perredistas, el polémico es ex síndico en el trienio del panista Jaime Rafael Díaz Ochoa, Humberto Zúñiga, y solo quedó César Valerio Castillo, de la corriente Foro Nuevo Sol, que andan muy apagados.
Julio García, dirigente del PRD en Mexicali, perdió el rumbo y ahora es un Youtuber y feisbukero que al parecer fue contratado por el Gobierno del Estado, para atacar a Mexicali Resiste, al menos así lo han denunciado quienes traen en jaque al Congreso del Estado con sus ruidosas y a veces violentas manifestaciones. En Tecate, el PRD no figura, es más no tiene oficinas.

Una alianza con Acción Nacional, porque ya López Obrador dijo que en el 2018 no va con el PRD, parece ser la única oportunidad que tienen los perredistas de Baja California de sobrevivir… claro, si las tribus que la forman logran superar sus diferencias en aras de reagruparse.