Científicos ven posible diseñar nuevos tratamientos para curar el Sida tras el caso de éxito de seis pacientes infectados de VIH que eliminaron el virus de su sangre y tejidos tras los trasplantes.

MADRID.- Seis pacientes infectados con VIH eliminaron el virus de su sangre y tejidos tras ser sometidos a trasplantes de células madre.

Científicos consideran que el tratamiento con células madre podría haber contribuido a una potencial desaparición del VIH, lo que hace posible diseñar nuevos tratamientos para curar el Sida.

Dichos pacientes tienen el virus indetectable en sangre y tejidos y uno de ellos ni siquiera tiene anticuerpos, lo que indica que el VIH podría haber sido eliminado de su cuerpo.

Así lo sostiene la investigación que publica la revista “Annals of Internal Medicine” sobre el logro de científicos del Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa de Barcelona y del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, sobre los seis pacientes con VIH que recibieron un trasplante de células madre.

Todos mantienen el tratamiento antirretroviral, pero los investigadores creen que la procedencia de las células madre -de cordón umbilical y médula ósea-, y los 18 meses en cada caso como tiempo transcurrido para lograr el reemplazo completo de las células receptoras por las del donante podrían haber contribuido a una potencial desaparición del VIH.

María Salgado, autora del artículo e investigadora del IrsiCaixa, junto a Mi Kwon, hematóloga del Hospital Gregorio Marañón, explicó que el motivo de que actualmente los fármacos no curen la infección por el VIH es el reservorio viral, formado por células infectadas por el virus que permanecen en estado latente y no pueden ser detectadas ni destruidas por el sistema inmune.

Factores asociados con el trasplante de células madre podrían contribuir a eliminar este reservorio del cuerpo  mientras por el momento el trasplante de células madre se recomienda exclusivamente para tratar enfermedades hematológicas graves.

Como parte de la investigación de posibles mecanismos de erradicación del VIH asociado con el trasplante de células madre, incluyeron en un estudio a seis participantes que habían sobrevivido al menos dos años después de recibir el trasplante, y todos los donantes carecían de la mutación CCR5 Delta 32 en sus células.

Tras el trasplante, todos los participantes mantuvieron el tratamiento antirretroviral y lograron la remisión de su enfermedad hematológica tras la retirada de los fármacos inmunosupresores.

Tras diversos análisis, los investigadores vieron que 5 de ellos presentaban un reservorio indetectable en sangre y tejidos y que en el sexto los anticuerpos virales habían desaparecido completamente 7 años después del trasplante.

Según Salgado, "este hecho podría ser una prueba de que el VIH ya no está en su sangre, pero esto sólo se puede confirmar parando el tratamiento y comprobando si el virus reaparece o no".

El estudio se basó en el caso de 'El Paciente de Berlín': Timothy Brown, una persona con VIH que en 2008 se sometió a un trasplante de células madre para tratar una leucemia.

El donante tenía una mutación llamada CCR5 Delta 32 que hacía que sus células sanguíneas fueran inmunes al VIH, ya que evita la entrada del virus en ellas.

Brown dejó de tomar la medicación antirretroviral y hoy, 11 años después, el virus sigue sin aparecer en su sangre, con lo que se le considera la única persona en el mundo curada del VIH.

Con información de agencias