El joven de 26 años dijo a los policías que el profesor Alfredo Blancarte lo atacó primero

Por: Marco FLORES / HIPTEX

 

ENSENADA.- Un profesor de nombre Alfredo Blancarte, de 57 años de edad, se encuentra muy grave en el Hospital General tras haber sido acuchillado en el cuello, brazos y manos la medianoche del viernes 5 para amanecer sábado 6 de octubre.

De acuerdo con el Informe Policial Homologado, a las 23:53 horas del viernes 5 de octubre, policías municipales al encontrarse sobre recorrido de vigilancia recibieron un reporte vía radio Matra señalando que en la calle Ágata 163 de la colonia Pedregal Playitas había un riña y un lesionado por arma blanca.

Se dirigieron al sitio y llegaron alrededor de las 00:03 horas del sábado; tuvieron a la vista varias personas en la calle, quienes señalaron que el incidente había ocurrido en el tercer piso del citado domicilio, donde el profesor Alfredo estaba tirado, bañado en sangre.

“Al iniciar a subir las escaleras visualizaron sangre en las mismas y una toalla al parecer con sangre, por lo que continuaron subiendo y al llegar al tercer piso visualizamos en el área del balcón de uso común por donde se da acceso a los departamentos de ese piso, a un persona de sexo masculino de pants azul y una playera llena de sangre, mismo que estaba tirado y alrededor del mismo había sangre y tres personas a su alrededor tratando de auxiliarlo, mencionando que se encontraba lesionado, por lo que se solicita vía radio a C-4 envía una ambulancia de la Cruz Roja”, indica el IPH.

Los agentes narran en el IPH que donde comienza el balcón del tercer piso hay una puerta de vidrio corrediza de acceso a un departamento. En ese momento salió un hombre delgado, moreno claro, de 1.75 metros aproximadamente, vistiendo camiseta azul con estampado y pantalón del mismo color, manchado de sangre.

Se identificó como Juan Ramón de 26 años de edad, quien reconoció haber acuchillado a Alfredo, aunque su versión fue que el profesor intentó lesionarlo primero con un cuchillo y solamente se defendió.

Los policías municipales detuvieron al joven, al tiempo que el profesor Alfredo alcanzó a decir a los agentes que su inquilino lo había lesionado con el cuchillo; después no pudo hablar.

PERITO MÉDICO DETERMINA QUE EL PROFESOR FUE ATACADO

La perito médico que compareció ante la PGJE manifestó que “el día 06 de octubre del corriente emití un Certificado de Integridad Física a nombre de Juan Ramón, esto por petición del C. Agente del Ministerio Publico, agregando que en relación a las lesiones que le fueron certificadas al antes citado se encontraban hematomas, excoriaciones y equimosis las cuales no corresponden a huellas de defensa, así como tampoco a una agresión directa con un objeto punzocortante; ese mismo día 06 de octubre del 2018 de igual forma se me solicitó dentro de la misma carpeta certificar de integridad física al de nombre Alfredo, quien se encuentra en la cama 35 de la sala de hombres del Hospital General y a quien una vez que lo tuve a la vista certifiqué múltiples lesiones cortantes en cuello, extremidades superiores e inferiores, las cuales predominan en cara posterior de ambos antebrazos en dedos y palmas de ambas manos mismas que corresponden a una agresión directa con un objeto punzo cortante y que son características de una posición de defensa”.

IMPUTADO, EL VIERNES SE DETERMINA SI LO VINCULAN A PROCESO

Como datos de prueba de la Procuraduría General de Justicia del Estado, quien ya imputó a Juan Ramón por el delito de lesiones calificadas y el viernes 12 de octubre se decidirá si el juez lo vincula a proceso, obran el IPH, el acta de inspección y administración de la escena y de la vestimenta del imputado,  certificados de integridad del profesor y el detenido, así como la comparecencia del perito médico de Servicios Periciales.

El certificado de integridad física del profesor Alfredo arroja que las lesiones sí ponen en riesgo la vida, sí ameritan hospitalización, sí requieren tratamiento médico y tardan en sanar más de 15 días.

El certificado de Juan Ramón indica que sus lesiones no ponen en riesgo la vida, no ameritan hospitalización, sí requieren tratamiento médico y tardan en sanar menos de 15 días.