Apenas recobró su libertad bajo fianza en enero pasado, el edil con licencia se dio a la tarea de merodear Palacio Municipal e inclusive entrar como “oyente” a las reuniones de la Comisión de Seguridad que encabeza su suplente.

Por Alberto Sarmiento Reyes / Hiptex



El regidor panista Luis Torres Santillán no tiene ningún impedimento legal y político para regresar al Cabildo y asumir de nueva cuenta la Comisión de Seguridad Pública. El edil fue detenido el pasado 16 de diciembre junto con un grupo de residentes de Tijuana, durante un operativo realizado por la Fiscalía del Condado de San Diego, California, que contó con la participación de la Agencia Antidrogas de los Estados Unidos (DEA, por sus siglos en inglés). En su oportunidad, la Fiscalía de San Diego, dejó en claro que la detención del regidor y el grupo de residentes tijuanenses estaba relacionada con el delito de lavado de dinero.



El juez le impuso una fianza de 5 millones de dólares, lo que reflejaba la magnitud del problema en que se encontraba metido el edil del Partido Acción Nacional (PAN), quien apenas había estado en la regiduría por 11 días. Una Navidad amarga fue la que Luis Torres y cómplices vivieron en la Cárcel Central de San Diego, sin embargo, tras el pago de 300 mil dólares pudo recobrar su libertad y seguir el proceso desde su domicilio en Tijuana, porque incluso tuvo el beneficio de poder cruzar la linea cuando lo considerase necesario. Eran los primeros días de enero, y Luis Torres ya había dado un paso importante por esclarecer su complicada situación legal ante la justicia estadounidense.



El miércoles de la semana pasada, la Fiscalía del Condado de San Diego, desestimó cargos de lavado de dinero contra Luis Torres, acusado inicialmente de participar en un plan que involucró el contrabando ilegal de fondos a Estados Unidos procedente de México. Para ser exonerado, se declaró culpable de un delito menor, admitiendo que era un “accesorio de un crimen”, por el que fue condenado a tres años de libertad condicional sin supervisión, 20 días de trabajo voluntario y acreditado por los 20 días que pasó tras las rejas. Entre sus argumentos, Luis Torres afirmó seguir trabajando al frente de un negocio familiar, Productos Diamond, que se dedica a importar productos como arroz, frijoles y lentejas de proveedores de Estados Unidos, Canadá y China, para su distribución en México. La acusación inicial de la fiscalía de San Diego, era que Luis Torres Santillán lavó más de 10 millones de dólares entre octubre de 2014 y julio de 2016, a través de otro negocio familiar denominado Cambiario Olymar, S.A. de C.V. Luis Torres ha sido, hasta el momento, el segundo de los 12 acusados, que se ha declarado culpable, ocho de los cuales siguen en prisión y cuatro se encuentran en libertad bajo fianza. Si apenas recobró su libertad bajo fianza en enero pasado, el edil con licencia se dio a la tarea de merodear Palacio Municipal e inclusive entrar como “oyente” a las reuniones de la Comisión de Seguridad que encabeza su suplente, José Vicente Jiménez Oceguera, es de esperar que muy pronto aliste su incorporación al Cabildo. Legalmente, se asegura en Palacio Municipal, no hay impedimento alguno para que ello ocurra. El pasado 11 de enero, el empresario Luis Torres Santillán declaró que no pretendía volver “de inmediato a la administración pública en la ciudad”. Dos días después, el dirigente municipal del PAN, Joaquín Palomera Ramírez, dejó abierta la posibilidad de que el edil regresase al Cabildo, a condición de que quedase absuelto de los cargos que enfrentaba en ese entonces y de los cuales ha sido exonerado recientemente. Su regreso, por consiguiente se da por descontado en Palacio Municipal, legalmente no existen argumentos para impedírselo. Aunque no se ha pronunciado, la dirigencia del PAN tampoco está en posibilidad de impedir su regreso… salvo que políticamente su retorno traiga un costo. ¿Y lo ético? eso depende de una decisión personal del regidor con licencia… máxime cuando preside la Comisión de Seguridad Pública y la situación de inseguridad y violencia que aqueja a la ciudad obliga a un compromiso que cierre el paso a cualquier resquicio de especulación y duda. La última palabra la tiene Luis Torres… las consecuencia políticas de su regreso al Cabildo las tendrá el PAN y el gobierno municipal.