Todo indica que se acabó la luna de miel entre el dirigente estatal y algunos priistas que le apoyaron a ganar…

Por Alberto Sarmiento Reyes / Hiptex



Su apretado triunfo el pasado 26 de julio en la contienda por la dirigencia estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), le dio a David Ruvalcaba Flores un apretado margen de maniobra para sacar adelante el proyecto que presentó y fuera respaldado por 261 consejeros políticos identificados con Jorge Hank Rhon y no pocos que lo estaban con el embajador Fernando Castro Trenti.



Ruvalcaba logró lo que parecía imposible, “exorcizar” al priismo de Baja California, es decir, arrancarle a la corriente de “El Diablo” Fernando Castro Trenti la dirigencia estatal, la cual presentó como su candidato a Jesús García Castro, y catara 244 votos de los asistentes a la asamblea estatal electiva celebrada aquel día en Tecate.



Fueron 17 votos la diferencia que le dieron el triunfo a David Ruvalcaba y aunque encabezó el coro de “unidad”, “unidad” al proclamarse su triunfo… los priistas sabían que se trataba de una empresa sumamente complicada para su nuevo dirigente.



Pero lo que pocos podían advertir era que la división se diera entre David Ruvalcaba y los priistas que le apoyaron a triunfar en la inédita jornada que vivió el priismo.



Todo indica que la luna de miel de David Ruvalcaba con algunos de los liderazgos que le impulsaron y apoyaron en su campaña se ha acabado.



La primera lista de integrantes del Comité Directivo Estatal dada a conocer por David Ruvalcaba la semana pasada ha ahondado las diferencias entre un grupo de priistas que se sienten desplazados por los acuerdos que su dirigente está realizando.



Los nombramientos de Ricardo Fletes García, como secretario de Acción Electoral, de Rosa Aurora Martínez, como secretaria de Asuntos Migratorios, y de Daniel Romero Mejía al frente de la Secretaría de Vinculación con el Sector Empresarial, entre otros, han sido fuertemente cuestionados.



Pero esos cuestionamientos no provienen de priistas de la corriente de Jorge Hank Rhon como se supondría para el caso de Romero Mejía, uno de los cercanos colaboradores de Fernando Castro Trenti.



No. La oposición que enfrenta David Ruvalcaba se ha generado en liderazgos que hasta antes de la elección, habían formado parte de la corriente de castrotrentista.



Pero donde sí hubo un rechazo casi generalizado, fue el decisión de David Ruvalcaba de designar a la joven abogada Dulce Janeth Valdez como titular de la Contraloría en el partido.



No solo se cuestiona la falta de capacidad y trayectoria, también que en una posición tan importante para la rendición de cuentas de los recursos del partido, David Ruvalcaba haya colocado una profesionista con la que guarda una cercana relación personal.



Contrario a su discurso de unidad y pluralidad que lanzó el día que ganó la elección por un margen de apenas 17 votos, con éste y otros nombramientos, los priistas se preguntan si así comienza su dirigencia, ahorita que ni siquiera de sienta bien en la silla, se esperarán cosas peores en lo subsecuente.



El discurso “renovador” que esgrimió David Ruvalcaba Flores para vencer en las elecciones internas priistas, fue hecho a un lado por el ahora líder estatal tricolor en cuanto estuvo sentado en la silla, le reprochan quienes fueron sus aliados y hoy amenazan con una revuelta que pretenden hacer llegar hasta el mismo Enrique Ochoa Reza, dirigente nacional del tricolor.



Y no serán pocos, pues el pasado viernes, en conferencia de prensa, Ruvalcaba advirtió que le va a pedir al Comité Ejecutivo Nacional de su partido que le entregue los recursos que, por concepto de prerrogativas nacional, le tocan al CDE bajacaliforniano.



Ruvalcaba mató, de esa forma, toda esperanza de cambio en el PRI estatal, pues ya exhibió que el año que durará su presidencia no será de trabajo para impulsar al tricolor, sino para que él y los suyos se sirvan con la cuchara grande… aseguran sus ahora detractores.



Enrique Acosta Fregoso, ex dirigente estatal del PRI, con una larga y polémica trayectoria política es señalado de haberse apoderado del partido en una alianza con Rubalcaba Flores.



Caros, muy caros le están costando los 17 votos que le dieron el triunfo en los comicios al hoy dirigente estatal del PRI.



A esta revuelta que no tarda en evidenciar hay que sumar la próxima visita por tierras bajacalifornianas del embajador de México en Suiza, Fernando Castro Trenti, a quien algunos de sus seguidores que apoyaron a Ruvalcaba Flores ahora pretenden buscar para que los ayude a “recuperar al partido”.