El oxígeno comenzó a bajar y ya murió un buzo.

BANGKOK, TAILANDIA.- La muerte de uno de los buzos durante las tareas de apoyo a los 12 menores y su entrenador de fútbol atrapados en una cueva de Tailandia y la caída de niveles de oxígeno en el sitio, vuelve urgente la extracción de los afectados y descarta la opción de que sean sacados buceando de manera individual.

Ante este panorama, Elon Musk, dueño de Tesla, SpaceX y The Boring Company, tiene un plan para rescatar a los adolescentes que ya comenzaban a presentar signos de agotamiento y ansiedad tras dos semanas de quedar aprisionados en el sitio inhóspito y rodeado de agua, que ahora carece también de niveles óptimos de oxígeno.

El  plan de Musk consiste en insertar un tubo de nailon a través de la red de cavernas hasta donde están las víctimas, luego inflarlo con aire para que se adapte a las formas de la rocas y permitir que los niños pasen por él sin contratiempos.

Para lograrlo, se apoyaría en ingenieros de su equipo de las empresas SpaceX y The Boring Company, de transporte aeroespacial y excavación, respectivamente, que son considerados entre los mejores del mundo y ya fueron enviados a Tailandia por Musk para elaborar el plan de rescate.

El fundador de Tesla, empresa de vehículos eléctricos, páneles solares y energía limpia, temió desestimar posibilidades por no tener presencia en el lugar de la emergencia y envió al personal.

Si bien autoridades tailandesas habían considerado que el grupo podía permanecer en la cueva hasta por meses si se les suministraban insumos básicos en tanto bajaban los niveles de agua que inundan sus alrededores, esa ya no es una opción.

Tampoco, su extracción individual buceando, como lo buscaba el gobierno Narongsak Osottanakorn en Chiang Rai. Expertos habían advertido el riesgo al que se enfrentarían los menores antes de que un experto en buceo falleciera en su recorrido acuático para llevar insumos a los afectados.