TIJUANA.- A 96 días de que se registrase el deslizamiento de tierra en la colonia Lomas del Rubí, que dejó sin casas a más de 157 familias, afectados y residentes del lugar siguen en espera del dictamen que deslinde responsabilidades y les permita dirigir sus demandas de indemnización.

Ante la falta de respuesta del gobierno municipal, Ricardo Montiel, uno de los afectados por los derrumbes, se ha puesto en huelga de hambre en espera que tengan respuesta de las autoridades y de la empresa Grupo Melo, constructora a la que se responsabiliza de la tragedia que viven más de 700 personas que perdieron su patrimonio desde enero pasado.

Montiel, se ha instalado, con el apoyo una mujeres igualmente afectadas, en la glorieta Cuauhtémoc de la Zona Río, en un improvisado campamento en el que desde la tarde del martes se ha mantenido sin ingerir alimento sólido.

“Aquí voy a seguir hasta el viernes a las 11 de la mañana… si para entonces no nos atienden en nuestras demandas, nos iremos a instalar en Palacio Municipal”, adelanta Montiel.

La incertidumbre de los residentes de Lomas del Rubí se agravó hace unos cinco días, cuando a raíz de trabajos de perforaciones ordenadas por la Secretaría de Desarrollo Urbano del Municipio, se empezaron a producir nuevos deslizamientos de tierra.

La calle Libertad Patria, la principal del asentamiento, ha empezado a colapsarse, poniendo en riesgo casas que hasta unas semanas se consideraban fuera de la zona de riesgo de derrumbe.

Montiel insiste que la responsable de la tragedia que viven 157 familias es la constructora Grupo Melo, por los cortes de tierra que hiciera en la parte baja de Lomas del Rubí para construir un fraccionamiento de su propiedad.

Lamentan que ni el alcalde Juan Manuel Gastélum Buenrostro ni el gobernador Francisco Vega de Lamadrid atiendan sus demandas, porque suman ya 96 días de incertidumbre, sin que sepan el futuro de su situación ni a qué instancia tendrán que acudir para exigir su indemnización.

Igualmente denuncian que Grupo Melo sigue sin atender sus demandas de hacerse responsable de la tragedia que ha ocasionado en más de 150 familias.

Ricardo Montiel asegura que en las más de 24 horas de estar en ayuno, ningún funcionario municipal ha acudido a buscarle, agradece a policías municipales que le han brindado vigilancia y agua potable, también refiere que decenas de automovilistas le expresan su respaldo e incluso apoyo con agua, a sabiendas que mantiene el ayuno.