El presidente Joe Biden anunciará el retiro de las fuerzas estadounidenses de Afganistán antes del vigésimo aniversario de los ataques del 11 de septiembre de 2001

WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS.- El presidente Joe Biden anunciará su decisión este miércoles de retirar completamente las fuerzas estadounidenses de Afganistán antes del vigésimo aniversario de los ataques del 11 de septiembre de 2001, declarando que es “hora de que las tropas estadounidenses regresen a casa”.

“No podemos continuar el ciclo de extender o expandir nuestra presencia militar en Afganistán con la esperanza de crear las condiciones ideales para nuestra retirada, esperando un resultado diferente”, dirá Biden, según extractos del discurso difundido por la Casa Blanca.

Biden anunciará la retirada, junto con las fuerzas de la OTAN, de la Sala de Tratados de la Casa Blanca, donde el presidente George W. Bush anunció el comienzo de los ataques aéreos estadounidenses en Afganistán hace casi dos décadas.

Después de hablar, el presidente viajará al Cementerio Nacional de Arlington para visitar la Sección 60, el lugar de descanso final de las tropas estadounidenses que murieron en los conflictos de Afganistán e Irak.

Los eventos están destinados a subrayar el alcance del conflicto armado más largo del país, y Biden dirá que no está dispuesto a pasar la responsabilidad a otro presidente de Estados Unidos.

“Es hora de poner fin a la guerra más larga de Estados Unidos”, dirá Biden.

La fecha límite de septiembre no “se basa en condiciones” y podría completarse antes, según un alto funcionario de la administración que informó a los periodistas sobre la condición de anonimato el martes. El funcionario dijo que la administración de Biden concluyó que podría abordar cualquier amenaza terrorista proveniente de Afganistán desde otros lugares.

Actualmente hay más de 2 mil 500 soldados estadounidenses en el país, trabajando junto a unas 7 mil fuerzas aliadas.

La nueva fecha límite significa que Biden dejará unos pocos miles de soldados en el país devastado por la guerra más allá del objetivo del 1 de mayo establecido en un acuerdo entre la administración Trump y los talibanes el año pasado.

Biden había señalado que veía ese plazo original como “difícil” de cumplir dada la continua violencia en el país y la falta de progreso en las conversaciones de paz entre el gobierno afgano y los talibanes.

Las únicas fuerzas estadounidenses que permanecerán en el país serán las de proteger a los diplomáticos estadounidenses en Afganistán, pero la administración aún no ha decidido el tamaño y alcance de su presencia diplomática o la huella militar que la acompaña, dijo el funcionario.

Al retrasar el retiro de las tropas, Biden se arriesga a represalias lideradas por los talibanes por romper el acuerdo de alto el fuego alcanzado durante la administración Trump y a las consecuencias políticas de un público estadounidense cansado de la guerra de dos décadas. Pero los líderes militares y diplomáticos habían dicho que una retirada apresurada podría desestabilizar el país, dejando a las tropas aliadas en riesgo y con el riesgo de un resurgimiento de grupos terroristas.

El presidente Ashraf Ghani de Afganistán dijo que discutió la decisión de Estados Unidos con Biden y que las fuerzas de defensa de su país son “totalmente capaces de defender a su gente y su país”.

“La República Islámica de Afganistán respeta la decisión de Estados Unidos y trabajaremos con nuestros socios estadounidenses para garantizar una transición sin problemas”, dijo Ghani en Twitter.

El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, estuvo en Bruselas este miércoles, reuniéndose con líderes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte mientras trabajaban para coordinar la reducción. Blinken dijo que Estados Unidos buscaría “una retirada segura, deliberada y coordinada”.