Corea del Norte realizo uno de los lanzamientos mas potentes el pasado 29 de noviembre.

NUEVA YORK.- Tras la última prueba balística de Corea del Norte, el Consejo de Seguridad procedió a dar un nuevo giro de tuerca a la batería de sanciones que aplica al régimen de Pyongyang al adoptar una resolución que restringe de una manera drástica sus importaciones de productos petroleros refinados y da un plazo de dos años a los empleados que tienen en el extranjero para volver al país.

En este año, Corea del Norte realizo una veintena de lanzamientos de misiles, el más potente el pasado 29 de noviembre. Por lo que Estados Unidos buscaba la prohibición total de las importaciones de petróleo y que se impusiera una congelación de los bienes del Gobierno norcoreano y de su líder supremo, Kim Jong-un. Era una opción extrema que habría supuesto el veto de China y de Rusia.

La resolución da como resultado el cierre al grifo de crudo a cuatro millones de barriles anuales y limita las importaciones de productos refinados como el diésel y el queroseno a medio millón de barriles. Lo que representa un recorte del 90% en el suministro que nutre su economía. En paralelo, se restringen sus exportaciones de productos alimentarios, maquinaria, equipamiento eléctrico, madera y barcos.

El texto fue redactado por EU y negociado con China, principal suministrador de energía con Corea del Norte. También pide a todos los países de la ONU que se abstengan de exportar equipamiento industrial, maquinaria, vehículos para el transporte y metales industriales. El objetivo es cortar las vías de ingresos del régimen. Estas restricciones se suman a las que se adoptan por la vía unilateral.

La resolución se aprueba al concluir la presidencia de Japón en el Consejo de Seguridad. El último misil intercontinental, con el que Pyongyang se declaró potencia nuclear, tendría capacidad para alcanzar cualquier punto de EU. Pekín está aceptando así que se eleve más la presión, ante las continuas provocaciones, aunque insiste en que la solución de la crisis debe ser diplomática.

El pasado 11 de septiembre se prohibieron las importaciones de gas natural líquido y condensado, y se prohibieron sus exportaciones de productos textiles y se negó la concesión de nuevos permisos de trabajo.