Son ya diez años que la comunidad mormona en general, les ha tocado sufrir pérdidas violentas de miembros de sus familias

CIUDAD DE MÉXICO.- Todo comenzó con una oración, de ahí salieron los acuerdos para una reunión en Bavispe, Sonora a inicios de enero próximo, la puesta en marcha de un plan piloto que dé mayor seguridad a los municipios y el compromiso de informar todo lo relacionado con el ataque a las familias LeBarón y Langford.

A los LeBarón, y a la comunidad mormona en general, les ha tocado cada 10 años sufrir pérdidas violentas de miembros de sus familias mexicoamericanas asentadas en los estados de Sonora y Chihuahua.

Las revelaciones tras la reunión en Palacio Nacional con el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien estuvo acompañado de parte de su gabinete, incluyen la detención de presuntos responsables de la masacre, entre ellos, la persona que grabó el video mientras ocurría el ataque contra 17 personas, tres mujeres y el resto niños, que dejó nueve víctimas mortales -entre ellos seis menores- y cuatro heridos.

Los niños heridos aún están en recuperación pero ya fueron dados de alta de un hospital de Phoenix, Arizona, en Estados Unidos; uno de ellos tiene la mandíbula con sujetadores porque un balazo le destrozó la boca, otro de los pequeños con heridas en el pecho todavía sigue siendo atendido.

Y el viudo de Rhonita LeBarón, una de las víctimas mortales junto con cuatro de sus niños, Howard Miller, optó por quedarse trabajando en Dakota del Norte y llevarse a sus tres pequeños sobrevivientes, los únicos hijos que le quedan después de la masacre del cuatro de noviembre pasado cerca de La Mora, Sonora.

“Él no ha querido venir -dice Adrián respecto a su yerno-, mejor se llevó a sus niños, duerme con ellos y los abraza por las noches, después de trabajar”, menciona que Rhonita era la única esposa de Howard, pues ella no aceptaba la práctica de la poligamia y constituían una familia unida junto con sus siete descendientes.

Hay un video donde ordenan: ¡Quémenla!

“Fue un subprocurador, y nos dio un informe muy preciso: pusieron el video y nos dijeron de dónde lo agarraron (…), es de donde estaban desde el cerro y acribillaron a mi hija, todo se ve. Hay un video donde, así no (sic) los cuentan, yo no lo he visto -aclaró-, donde la persona que lo está grabando está atrás de los que están atacando, pero cuando empieza el video, ya sólo están disparando uno que otro, pero llegan a donde estaba mi hija acribillada, la rodean, y grita el jefe: quémenla!”, expresa el padre de Rhonita.

Para Adrián LeBarón, padre de cinco víctimas, el que la Fiscalía General de la República tenga en su poder ese video significa que se está avanzando en las investigaciones. “Ese video existe y en ese video están agarrándole la cola al problema”, aseguró.

También mencionó que los teléfonos de su esposa y de él mismo fueron entregados a los agentes de la Oficina Federal de Investigaciones, FBI, quienes estuvieron en La Mora haciendo el trabajo de cooperación con el gobierno mexicano.

En esos teléfonos están las fotografías de cómo quedaron los cadáveres de las víctimas acribilladas, los tres vehículos donde viajaban, incluso la camioneta quemada en la que estaban los cuerpos de su hija y sus nietos, que terminaron calcinados.

En la reunión con el presidente tomó la palabra Shalom Tucker de LeBarón, quien está inconforme con el tratamiento oficial a la situación que la dejó sin una hija y cuatro nietos.

“Mi esposa sí les dijo ´yo no me conformo con eso, yo quiero saber quién dio la orden de más arriba, de que se trató esto, porque no nos vamos a conformar con eso´. Pero nos dijeron que están con la investigación, que están dando y dando y dándole”, indicó Adrián.

Las visitas de LeBarón Soto a la Ciudad de México siempre han estado marcadas por la tragedia, explica mientras camina por el primer cuadro de la capital mexicana, al término de la reunión este lunes con Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, tras la reunión con el Presidente López Obrador.

“Parece ser que venimos cada que hay una muerte, puede ser metafóricamente, pero yo ya he venido por tres o cuatro muertes. Yo por culpa de la muerte de Benjamín (LeBarón) vine, y me llevaron a ver al Procurador General de Justicia de la Nación (sic) cuando asesinaron a Benjamín y a Luis Carlos (Widmar Stubbs), entonces yo sí sé a dónde ir…”, relata en alusión a los hechos ocurridos el 7 de agosto de 2009.

La culpa no es de AMLO

“Porque yo no creo que esta culpa es ni cerquitita de Andrés Manuel López Obrador, es de las instituciones y todo, está muy difícil esta situación: yo sí creo que Andrés Manuel puede empezar resolver ciertas situaciones, pero yo no puedo echarle la culpa, al contrario, yo estoy listo para cooperar”, dijo convencido.

Indicó que para lograr cambios en materia de seguridad se hace necesario acudir directamente a Palacio Nacional.

“Seguro convino salirse del rancho, y venir a hacer algo, yo siento que sí valió la pena venir, pero yo no soy suficiente educado, porque yo todavía está todo por verse. Hablamos de proyectos. Entonces esta cosa esta moviéndose y pues yo en ese sentido estoy contento”, expuso.

El 100% de los municipios en México son secuestrables por crimen

Los municipios en México son secuestrables porque no hay representación de los tres poderes y porque las autoridades son puestas por los grupos delictivos, afirmó Adrián LeBarón Soto en entrevista con Notimex.

“Pues claro, ese es el problema de nuestra sierra; por eso la raíz tiene que ser en edificar el municipio, y el crimen organizado no quiere que yo le siga promoviendo a esta idea, porque ahí es donde están fuertes: en que pueden secuestrar municipios… ¿tú porque crees que pueden secuestrar municipios?, ¿por qué? ¡Porque están secuestrables, mija! Por eso los secuestran, están secuestrables el 100%”, enfatizó.

LeBarón Soto pidió al presidente Andrés Manuel López Obrador que se empiece en Bavispe, Sonora o en Galeana, Chihuahua un programa que se llame Municipio en Paz, donde haya representación de los tres poderes de gobierno y que se reforme la ley.

“Porque estoy empujando que esta ley pase, aunque a mucha gente le pueda afectar. ¿Cuál ley?, que el municipio tenga las cuatro patas, el ejecutivo, el ministerio, el juez de la paz y que el director de seguridad pública sea de elección popular y lo podamos quitar el pueblo”, exigió.

La reforma que solicitan es que haya revocación de mandato y reelección, para quien dé resultado se quede y el que no, se vaya del cargo.

México trae el mismo dolor

“Sentí que la situación los rebasa”, dijo Adrián LeBarón al mencionar que durante la reunión el lunes pasado, con el presidente Andrés Manuel López Obrador y con el canciller Marcelo Ebrard, tuvo la percepción de que las condiciones de inseguridad que atraviesa el país requieren el apoyo de todos.

“A mí me hicieron sentir que este problema los rebasa a ellos, yo siento que el presidente necesita tanto la cooperación del ciudadano que está pidiendo a gritos que le ayudemos, así lo siento”, dijo al añadir “seríamos unos irresponsables, de haberlo elegido y que haya ganado si no tomamos nuestra propia responsabilidad como ciudadanos…”.

Al rechazar el término “vendepatrias” con el que los han calificado después de la marcha del pasado domingo, Adrián LeBarón aseguró que tener doble nacionalidad “los hace más mexicanos y más ciudadanos del mundo”.

“Me vengo a esta urbe cada vez que me pasa algo, porque allá no te das a notar. Entonces, fíjate, me importó mucho la marcha porque nosotros no queríamos ir a algo caótico, muchos me aconsejaron no ir, pero decidimos tomar el riesgo y creo que fue a nuestro favor. Porque encontramos que México sí trae el mismo dolor que traemos nosotros”, dijo convencido.

Añadió que la reunión que finalmente se dio este lunes con las autoridades federales la estuvieron solicitando durante mucho tiempo.

“Llevo 10 años peleando esta oportunidad, porque yo tengo muy claro lo que necesitamos en el municipio, y lo más triste es que me costó mucho, me costó demasiado tener la oportunidad de proponer estas ideas”, dijo lamentando la masacre ocurrida hace un mes donde asesinaron a parte de su familia.

Adrián LeBarón nació un Gómez Farías, Chihuahua, “a tres municipios de donde radico ahora, hacia la sierra. Y es uno de los lugares más secuestrados, ahí sí me da miedo meterme y ahí sí es tierra de nadie. Ahí había muchos Sotos, yo soy LeBarón Soto, ya no hay ni uno. Tengo una tía cieguita y sordita y un primo. Todo mundo se va, esos pueblos están abandonados”, puntualizó.

Mencionó que el secuestro de municipios por grupos delictivos es evidente, como sucedió en Bavispe, Sonora, que “cuando se plantó el ejército, el 70 por ciento de la gente abandonó el pueblo, ¿por qué se irían?”, dijo al aludir a la colusión de los habitantes con el crimen organizado.

“Queremos un parque nacional”

Para LeBarón Soto la zona donde fueron masacrados tres mujeres y seis niños indefensos debe convertirse en un parque nacional.

“Pues ahorita algo que estoy proponiendo es que, ahí se llama el Cañón del Púlpito y esa carreterita… en 1959 siendo López Mateos presidente, inauguró lo que se llama el “Espinazo del diablo” que unía a México con el pacífico, si no, te tenías que ir por tierra, ¿y sabes por dónde te ibas a Sonora en 1958?, por ahí”, relata refiriéndose a la brecha donde fue asesinada su hija y la que los pobladores de La Mora circulan para llegar a Chihuahua.

“Por ahí pasó Orozco, por ahí pasaron todos la Revolución Mexicana, ese era el único camino, históricamente lo han mantenido igual. Nosotros, mi padre, toda su vida cruzó por ese cañón, yo quiero que El Púlpito sea un parque nacional en memoria de los 17 acribillados. Lo he estado planteando en los medios, la gente de Sonora escuchó mi petición, y se lo peticioné al presidente, lo apuntaron”, dice.

Indicó que ello mantendría la memoria de un hecho violento que afectó a familias de la región.

“Y porque es una manera de enseñarle al mundo que sí les interesa hacer algo, porque si esa región no la recupera la nación y el mundo, a lo mejor toda la vida va a estar secuestrada y tú jamás vas a poder volver a ir a pizcar chiltepín, o la tunita”, sostuvo convencido.

“Esto fue un crimen contra la humanidad. Si hubiera habido un hombre en esta masacre a lo mejor no tendría la misma connotación. Pero fueron tres mujeres, que daban pecho, y sus hijos acribillados, caray”.

Adrián LeBarón desde el cuatro de noviembre no puede trabajar, acostumbrado al trabajo físico, no ha podido incorporarse a sus labores desde que mataron a su familia, ahora está devastado por la pérdida de nueve miembros de su comunidad, pero dispuesto a seguir luchando.

¿Qué mensaje se envía al pueblo de México?

“Pónganse en la lista, mexicanos, pónganse en la lista de desear rescatar su municipio, porque ahí yo sí estoy puesto en ayudarles”, ofreció.(Notimex)