Jaime Bonilla dijo que respetaré cualquier decisión de la SCJN. En caso de no resultar favorecido, expuso que no será el fin del mundo.

TIJUANA.- El gobernador electo de Baja California, Jaime Bonilla Valdez, afirmó que respetará cualquier decisión que emita la Suprema Corte de Justicia de la Nación en torno a las inconformidades que podrían derivar de la reforma constitucional por la vigencia a cinco años de la próxima administración, aprobada por mayoría en el congreso del estado, destacando que el Poder Ejecutivo no está por encima del Congreso de Baja California.

Bonilla Valdez dijo esta mañana ante la membresía del grupo Minarete que “ahorita está en cinco años, pero puede cambiar, independientemente de eso, nosotros vamos a trabajar todos los días igual, si es cinco o seis, y vamos a salir adelante con nuestros proyectos que tenemos plasmados por escrito y eso no va a cambiar el estado de ánimo, no vamos a decir que no tiene chiste. Eso no importa...No es el fin del mundo”, apuntó.





El gobernador electo conversó acerca de sus planes y proyectos de trabajo y expresó su visión acerca del período durante el cual va a dirigir a Baja California, y cuestionó: “¿para qué tanto brinco si está tan parejito el piso? Si tienen razón en sus inconformidades, lo va a decidir una autoridad. Yo no tengo problema, yo me sujeto y seré respetuoso de la ley, que lo decida la Suprema Corte, pero para qué tanto escándalo. Si creen ellos que tienen la razón, nomás que esperen... es todo lo que tienen qué hacer”, sostuvo.

Luego, abundó: “Conozco el Pacto Federal, lo dice muy clarito. Es un pacto entre iguales, el Congreso federal, es igual que un congreso estatal.  No tienen aquellos mucha más ascendencia o más autoridad moral que el congreso local. Eso es el pacto federal. Sin embargo, hay leyes que hasta se contradicen, he consultado a gente que conoce. Así como hay gente que dice que no fue correcta, hay gente que dice que somos completamente libres y soberanos en nuestras acciones”.

En una amplia disertación del tema, Bonilla agregó que “no hay autoridad por encima del congreso, al final del día los diputados son los que representan al pueblo, no el ejecutivo. Ellos son los que tienen el pulso del pueblo. Lo único que demuestra es que no hay chayote… No nos interesa que un medio hable bien de eso nada más para tratar de impresionar, al final del día eso se soluciona en la Suprema Corte y yo seré muy respetuoso con todo y gabinete, de lo que decida¨.

El gobernador electo reprochó haber sido blanco de un ataque mediático por parte de ciertos grupos con claros intereses políticos, “eran hasta 80 notas diarias, luego, cuarenta y creo que ya hay sólo dos... están entrando en cuenta que eso lo va a resolver la Suprema Corte de Justicia, y dejará de ser nota. Todos los medios al mismo tiempo iniciaron con descalificativos, acusaciones, injurias a diputados, asumiendo que se había cambiado la voluntad de los diputados porque hubo compensaciones.... ¨.

Por su parte, integrantes del grupo Minarete se refirieron a la importancia de que Baja California cuente con un gobierno de largo alcance, “dos años es algo ridículo, luego vendrá otra campaña política. Para los empresarios eso debe ser un insulto, por ello estamos a favor de un gobierno a largo plazo”, comentó José Galicot.

Bonilla Valdez al dirigirse a los miembros del Minarete, expresó que “no estamos esperando a tomar posesión el 1 de noviembre, ya estamos trabajando en muchos de los proyectos que se han platicado. Como les prometí, cada mes, vendré a rendir cuentas”, luego el gobernador electo los invitó a sumarse como asesores honorarios a resolver juntos los problemas de Baja California.

“Juntos, ustedes y el gobierno, haremos la diferencia. No será retórica, involúcrense...Esa es la esencia, no venimos a perder el tiempo”, les dijo finalmente.